El papa beatificará a la leonesa Esther Paniagua
La misionera, natural de Izagre, fue asesinada en Argelia en 1994 por terroristas islámicos cuando paseaba por la calle.
carmen Tapia | redacción
El 26 de octubre de 1994, cien sacerdotes oficiaban en la Catedral de León el funeral de la monja leonesa. Esther Paniagua, asesinada en Argelia. Más de 3.000 personas acompañaron ese día a la familia de Izagre en una ceremonia presidida por el obispo, Antonio Vilaplana. La mataron los integristas islámicos junto a otra compañera española, María Álvarez Martín, también misionera agustina natural de Burgos. El papa Juan Pablo II elogió entonces el coraje de las monjas, a las que calificó de mártires. Ahora, el papa Francisco acaba de autorizar la publicación del decreto que reconoce el martirio de Esther Paniagua asesinada el 24 de octubre al ser alcanzada en la cabeza por un disparo, efectuado por integristas cuando caminaba por el barrio de Bad El Ued, lugar en el que vivía desde hacía 20 años, en compañía de otras ocho hermanas de su congregación, las Agustinas Misioneras.
La noticia del asesinato conmocionó a la Diócesis de León. Paniagua llevaba 20 años en Argelia ejerciendo su labor misionera en el hospital Mailor. Pese al recrudecimiento de los asesinatos en la zona, tanto la Diócesis como su familia la animaron a regresar a León, pero ella nunca se planteó abandonar su misión social. En los dos años anteriores al asesinato de la leonesa, los integristas islámicos asesinaron a 66 extranjeros en un escenario de guerra tras la victoria en la primera vuleta del Frente Islámico de Salvación (FIS), que desencadenó la respuesta de los integristas con el asesinato de 10.000 personas desde el año 1991.
En Izagre
Esther Paniagua nació en la localidad de Izagre en el año 1949. Era la mediana de tres hermanas y a los 14 años dejaba su pueblo natal para estudiar en el colegio de las Agustinas Misioneras de Logroño, donde completó su formación inicial antes de recalar en León, donde pasaría a formar parte de la Comunidad de las Agustinas Misioneras y a completar sus estudios en la especialidad de Enfermería en la Obra Hospitalaria Nuestra Señor de Regla, destaca el Obispado en una nota de prensa. Desde León, en el año 1974 partiría para la misión en Argelia, donde trabajó como enfermera especialista con niños discapacitados. Tras pasar el verano del año 1994 en su localidad natal de Izagre, el 30 de agosto Esther Paniagua se despedía de su familia y partía para seguir con su misión en Argelia, donde ya se vivía entonces un claro ambiente de hostilidad que había llevado días antes del ataque que acabaría con su vida al cónsul de España en Argel a visitar a la comunidad de Agustinas Misioneras para invitar a las religiosas a refugiarse en la sede diplomática. Y en ese escenario de violencia que ya se había extendido por Argelia, el día 24 de octubre, cuando acudía a la celebración eucarística de la Jornada Mundial de la Misiones, Domund, que tenía lugar ese mismo, Esther Paniagua perdía la vida asesinada a tiros en las calles de Argel.
El obispo de León, Julián López, expresó ayer en un comunicado el «gozo y esperanza» con los que la Iglesia de León recibe la decisión del papa Francisco que «viene a aumentar en León el santoral de la Diócesis precisamente en este Año Pastoral Diocesano Vocacional».