VOTOS A FAVOR DE PP, PSOE Y CS
Madrid desagravia con unos jardines al almirante Cervera después de que Barcelona le entregara su calle a Pepe Rubianes
Los jardines de la Plaza de la Plaza de Conde Valle-Suchil, ahora sin nombre, recibirán ahora esta denominación
El pleno de la Junta de distrito de Chamberí ha aprobado este lunes la propuesta del grupo popular para que los jardines de la Plaza de la Plaza de Conde Valle-Suchil, ahora sin nombre, pasen a denominarse Jardines del almirante Cervera.
La iniciativa de los populares ha contado también con los votos a favor del PSOE y Cs mientras que los miembros de Ahora Madrid se ha pronunciado en contra. Precisamente el nombre de este almirante fue reemplazado en una calle de Barcelona por el del actor ya fallecido Pepe Rubianes.
El edil del PP en el Ayuntamiento de Madrid Pedro Corral ha asegurado que el almirante Pascual Cervera fue un "insigne marino" y destacó también por su defensa de la Primera República española contra el movimiento cantonalista. Además, ha recordado que a su mando estuvo la escuadra española en el combate de Santiago de Cuba contra la armada norteamericana, del que se cumplen 120 años el próximo 3 de julio, donde se ganó pese a la derrota la admiración incluso de sus enemigos.
"No hay mal que por bien no venga, y el pretendido agravio a su figura en alguna ciudad de España ha dado paso al rescate de un personaje injustamente olvidado en Madrid, que es lo que importa", ha afirmado el edil para destacar los valores y la actitud vital de Cervera, válidos en "cualquier época y en cualquier circunstancia".
TRAS LA POLÉMICA EN BARCELONA
La decisión de esta institución madrileña supone así una suerte de desagravio tras el remplazo barcelonés. El pasado mes de abril, la calle Almirall Cervera cambió de nombre para ser rebautizada con el nombre del humorista y actor Pepe Rubianes el pasado abril. La alcaldesa barcelonesa, Ada Colau, llegó incluso a tildarlo de "facha" en el acto de inauguración, aunque luego fuentes municipales rebajaron el tono diciendo que Colau bebía del tono que habitualmente usaba Rubianes en sus monólogos.
La familia de Cervera no se dio por satisfecha con las explicaciones, y tachó a Colau de "inculta". Ahora, apenas dos meses después, Cervera ve restituido su honor en parte, aunque la decisión se toma en Madrid y no en Barcelona.