Cada vez más leoneses buscan sexo en una app

«Me abrí una cuenta en Tinder cuando lo dejé con mi novio hace tres meses. Lo hice animada por mis amigas porque nos reímos mucho con algunas biografías. En este tiempo he quedado con dos chicos. A uno lo conocía pero había perdido el contacto con él. Al otro no lo conocía. Le pedí que me enseñara Madrid, ciudad en la que estudio. Tuvimos una cita y luego me dio plantón, no me contestó nunca más a los mensajes. En Tinder van a lo que van y si no lo consiguen te bloquean». Este es el testimonio de una joven leonesa, Rosa (nombre ficticio) que con 19 años recurre a la red social Tinder utilizada principalmente para ligar y mantener relaciones sexuales esporádicas con personas afines. El cambio social que introducen las redes sociales elimina el cortejo tradicional. «Las nuevas generaciones ya no se complican», explica Roberto Gorrais, Ceo de la AgenciaSeo.eu que constata que «Tinder ha pegado un acelerón importante» en usuarios leoneses, aunque la estrella en la los usuarios de Castilla y León es la app Badoo, «que a pesar de su descenso en búsquedas sigue siendo la favorita» por los castellanos y los leoneses, seguida de Meetic y Tinder.

Irene Folgado, autora del estudio que ha realizado la agencia evidencia que la llegada de las redes sociales como Tinder e Instagram están cambiando las relaciones sociales a la hora de superar las rupturas sentimentales y se utilizan en verano para encontrar nuevos ligues.

Cada vez más jóvenes leoneses como Rosa recurren a las aplicaciones móviles para pasar un rato en compañía sin complicaciones o conocer gente. Sin embargo, «existe todavía un tabú social», como explica José, otro leonés de 23 años que también utiliza Tinder. De hecho Rosa prefiere camuflar su auténtica identidad con este nombre ficticio. Este periódico ha intentado hablar con varios usuarios leoneses, pero la respuesta en todos los casos es la misma: «Nos da vergüenza que se sepa».

«Hay muchos jóvenes de León que utilizan Tinder pero no quieren reconocerlo, es como un tabú. Todavía no está aceptado socialmente aunque está a la orden del día. Hay usuarios que se descargan la aplicación en el móvil y la llevan oculta». José, estudiante de Biología en Oviedo, utiliza esta red social desde hace tres años. «Busco conocer gente. No busco pareja sino relaciones esporádicas, si surgen. He conocido a gente en esta red social que tiene otras intenciones que no son el sexo, como amantes de las rutas en bici, como yo, e incluso tengo amigos que son pareja tras conocerse a través de Tinder. Yo he quedado con 4 ó 5 personas pero no había feeling y se cortó la relación». A José le sigue pareciendo mejor opción conocer a nuevas personas «de fiesta en la calle». Rosa, la joven leonesa con identidad camuflada, reconoce que la aplicación Tinder le facilita la vida. «Hay un poco de todo. Como paso muchas horas en la universidad y no salgo apenas durante la semana, Tinder me ayuda a conocer gente. Voy a lo fácil. Casi todas mis amigas están en Tinder y tienen una cita por semana, pero luego esa relación no se consolida, aunque mi mejor amiga tuvo una pareja durante seis meses a la que conoció con esta red social. En verano lo utilizo menos porque salgo más a la calle. Sólo entro cuando estoy de exámenes y no puedo moverme de casa».

Piropos digitales

Las nuevas generaciones recurren a las redes sociales y cambiar la forma tradicional de ligar. En las redes surgen nuevos piropos digitales, verbos y gestos que se muestran el interés de uno de los usuarios en otros perfiles. «Cuando están interesados en conocer a otra persona, simplemente tienen que descargarse Tinder y swipear, el verbo que recibe el gesto de deslizar a la derecha o a la izquierda según te guste, o no, la persona que te muestra la aplicación. Y a partir de ahí, a esperar el match (ligue)», explican desde la AgenciaSeo.eu.

La tecnología da un giro a los comportamientos sociales y también a las relaciones sentimentales. «Tinder y Badoo son las aplicaciones más utilizadas que se utilizan para ligar, para encontrar a personas para mantener relaciones esporádicas. El perfil de usuario es más joven. Meetic tiene otro objetivo. Los usuarios tienen más de 25 años y buscan una pareja, algo más serio. Lovoo ha invertido mucho dinero en contactar con influencers para captar usuarios y lo ha conseguido. Es otra red social para ligar», explica el Ceo Roberto Gorrais.

«En verano muchas parejas rompen y con estas aplicaciones son más rápidas de superar porque es más fácil con relaciones esporádicas», explica Gorrais.

Además de Tinder, triunfan aplicaciones como Badoo, AdoptaUnTío o Lovoo, que son las herramientas más útiles para los antes llamados «amores de verano». Los picos más altos de usuarios en estas aplicaciones se dan entre los meses de junio y agosto. «Pedir el teléfono en una discoteca, a través de otro amigo haciendo de mensajero o en un papelito seguirá teniendo su encanto, pero las redes sociales son el nuevo cupido».

Las parejas menos jóvenes y con más experiencia tienen rupturas sentimentales por razones diferentes a los que tienen menos de 25 años. «Mantener una pareja en verano es complicado para los más jóvenes porque es una época de diversión, fiesta y vacaciones con amigos. En las personas de más edad las rupturas suelen estar provocadas por las vacaciones en familia y pasar mucho tiempo juntos, lo que puede provocar enfrentamientos y discusiones diarias», explican desde la AgenciaSeo.eu. «Las vacaciones en familia pueden llegar a ser muy estresantes y poner en peligro la convivencia».