medio ambiente
Calor y tráfico, cóctel de la contaminación
Radiación solar, tráfico rodado, industrias, calefacciones y aires acondicionados. Son los ingredientes de un episodio de contaminación por ozono troposférico (ozono «malo»), contaminante secundario que afecta a la calidad del aire de las ciudades y que ya se ha convertido en uno de los principales problemas de las administraciones. En presencia de radiación solar, este cóctel de contaminantes se transforma en ozono. Lo padecen grandes urbes como Madrid y Barcelona, pero al que tampoco escapan ciudades como Valladolid, con 150.000 vehículos circulando a diario, según Ecologistas en Acción. | efe