León, territorio de sangre joven y generosa

León envejece pero su sangre aún es joven. Y además muy generosa. Así lo certifican los datos de la memoria del 2018 de la Hermandad de Donantes de Sangre de León. Las donaciones alcanzaron la cifra de 12.043 unidades, lo que supone un incremento del 2,3% respecto al año anterior y además la media de edad de las personas que donan —entre 18 y 70 años—se sitúa en 40,1 años, señaló el presidente de la entidad, Martín Manceñido.

Con un total de 277 donaciones más que el año anterior, la hermandad se congratuló de unos resultados que «son una buena noticia» para la salud de las personas. En el área de salud de León se precisan 40 bolsas diarias de sangre para personas que de otra forma perderían la vida. Y otras 10 más en el área del Bierzo. En Castilla y León, donde se centralizan todas las donaciones, se precisan 450 bolsas al día y en España unas 6.000.

La sangre tiene un período de vida de 42 días, pero algunos de sus componentes como las plaquetas duran apenas 5 días por lo que la gestión debe ajustarse a las necesidades que se presentan. Las donaciones de sangre llegan a salvar a 80 personas cada día que «si no tuvieran sangre se morirían». «Nadie se muere esperando sangre en este país, aunque todavía hay mucha gente que fallece esperando un órgano», precisó Manceñido. Ni siquiera cuando se presentan necesidades de los grupos sanguíneos menos frecuentes. El sistema y la generosidad de la población dan respuesta a todas las necesidades que se presentan.

El mayor número de donaciones se registraron en el centro de salud José Aguado, con un total de 4.500 unidades recogidas en 2018. Por detrás se sitúa Astorga con 770 donaciones, La Bañeza con 760, y 565 en la plaza de Botines de León, un lugar estratégico.

A bastante distancia se encuentra el balance de la donación de sangre en San Andrés y Trobajo con 350 unidades recogidas. En Veguellina de Órbigo fueron recogidas 240 donaciones, 200 en la sede de la hermandad, 175 en Santa María del Páramo, y otras tantas en Valencia de Don Juan y Benavides de Órbigo. En Sahagún fueron 116 y otras 150 donaciones se recogieron entre el personal militar de la provincia.

La Universidad de León, un punto estratégico para la recogida de sangre, aportó un total de 600 unidades y otras 250 fueron captadas en diversos centros educativos.

Pero, por muchos logros que se consigan, no se puede bajar la guardia ni un solo día. La Hermandad de Donantes de Sangre de León centra sus esfuerzos entre la población escolar aunque aún no está en edad de donar sangre porque «recogeremos los frutos en el futuro», dijo Manceñido.

A la campaña en centros escolares, que se apoya con el cómic El fantástico viaje de una gota de sangre, se suma la «pionera» iniciativa de llevar la propaganda de la asociación a los pueblos más remotos de la provincia a través de los bibliobuses. Después, la hermandad organiza charlas de sensibilización. «Hay que sembrar», subraya la hermandad leonesa.