Dulce tradición y medio siglo de buen hacer
A. GIL | LEÓN
Es uno de los negocios más emblemáticos de la ciudad. Confitería Asturias se ha convertido, por méritos propios y desde hace años, en uno de los referentes en el sector. Todo comenzó cuando César García, el fundador del negocio, tenía 26 años. Junto a su mujer, Piana —de entonces 25— decidió convertir en realidad su inquietud de convertirse en confitero. Ahora, cincuenta años más tarde, ha conseguido hacer de aquel pequeño negocio que comenzó en el número 6 de la calle República Argentina se haya convertido en un ejemplo de buen hacer y tradición. «Yo tenía familia en Asturias, en Grado, y cuando terminé el servicio militar me fui allí a aprender el oficio. Años más tarde, regresé a León cuando murió mi padre y lo hice con aquella necesidad de dedicarme a la confitería», recuerda García, que describe aquellos primeros años de emprendimiento como «maravillosos».
Aquellos comienzos tuvieron lugar en las Navidades del año 69 cuando Confitería Asturias daba sus primeros pasos, un negocio al que se unieron más tarde dos de los hijos de César y Piana y que ahora celebra su cincuenta años de andadura.
«Nuestra inquietud por hacerlo bien siempre ha sido una constante. Nunca han faltado el sacrificio y la ilusión por superarnos a pesar de las trabas, que tampoco han faltado», explica César García, que asegura que La Asturiana —como también se conoce a esta confitería— no sería lo que es hoy sin el buen hacer de su mujer, que se encarga de la atención al público.
Tras los primeros pasos
Aquel primer negocio fue ampliándose con el tiempo y se trasladó al número 8 de la misma calle, República Argentina, donde todavía sigue. A él se han unido otros dos: La boutique del pan La Masera y La Gourmandise. El primero de ellos cuenta ya con treinta años de atención al público. «Comenzó en una época en la que las ‘boutiques’ se pusieron de moda en España y decidimos emprender en ese sentido». Después, llegó La Gourmandise, en Fray Luis de León, un espacio pequeño y coqueto con cafetería en el que poder disfrutar de algunos de los productos más típicos de Confitería Asturias.
Especialidades
Entre sus especialidades destacan el tonicillo de cielo, las tartas de almendra o los brioches, además del hojaldre, un producto que les ha dado fama, desde siempre. De cara a la Navidad, turrones artesanos elaborados por ellos y todo lo que compone el surtido de estas fiestas como figuritas o empiñonados. El chocolate es otra de sus especialidades, que abandera su hijo, y que se traduce también en una variedad deliciosa de turrones. Sin olvidar los panettones que elaboran en su obrador desde hace quince años y que se ha ganado, por méritos propios, el favor del público. Un producto de cuidada elaboración que destaca en Navidad pero que se vende durante todo el año. Al igual que ocurre con el resto de productos la materia que se emplea es de primera calidad y se elige de forma cuidadosa para que el resultado final sea el mejor posible.
Mucho más
Pero además. pasteles, bollería y más de treinta variedades de pan conforman el amplio abanico de productos pensados para satisfacer a todos los públicos y que se elaboran en el obrador que se encuentra en la avenida de Antibióticos, desde el que se da servicio a los distintos establecimientos con los que cuenta Confitería Asturias en la ciudad.