Salud
León impulsa una patente para frenar el cáncer colo-rectal
La AECC inicia las jornadas sobre investigación, El equipo de investigación que dirige el científico asturiano Borja Sánchez patentará un modelo que permitirá modificar la microbiota intestinal para frenar el cáncer colo-rectal
Después de tres años de investigación, la beca concedida por la AECC de León al grupo de investigación Microhealth, que dirige Borja Sánchez, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, concluye este mes con la creación de un modelo que será patentado como una herramienta para modificar la microbiota intestinal.
Las investigadoras Lucía Guadamuro García y Raquel Marcos Fernández presentaron ayer en el Club de Prensa de Diario de León el avance de esta investigación dentro de las V Jornadas sobre Investigación en Cáncer en León en las que colabora CaixaBank.
La metodología se ha obtenido dentro del proyecto de investigación La implicación de la composición de la microbiota intestinal en el desarrollo del cáncer colo-rectal , financiado por la AECC de León con 150.000 a lo largo de los últimos tres años. Esta investigación tiene dos objetivos. «Por un lado se trata de la búsqueda de componentes antitumorales producidos por bacterias que están presentes en el ácido láctico y por otro, ante esta evidencia científica probamos el Lactobacillus Acidophillus y otras bacterias en una línea celular —la HT29— que proviene de un adenocarcinoma colo-rectal», explica la científica.
El resultado es que «vimos un cierto efecto antiproliferativo, detuvo la proliferación de la línea celular sobre esta línea tumoral». El paso siguiente es buscar qué compuestos son los responsables de ese efecto. «La bacteria tiene miles de moléculas. Se trata de separar en fracciones lo que tenemos porque unas tienen más actividad que otras», explica la investigadora.
Lucía Guadamuro considera «importante» el hallazgo y valora que actúe deteniendo las células tumorales, en lugar de matarlas porque «es más seguro algo que no sea citotóxico», explica.
La segunda parte de la exposición de ayer corrió a cargo de Raquel Marcos, que presentó su modelo. El objetivo final es personalizar la microbiota y retirar bacterias o enriquecerla con otras en función de que sean patógenas o beneficiosas frente al cáncer colo-rectal. El trabajo desarrollado en el laboratorio del Instituto de Estudios Lácteos de Villaviciosa (Asturias) por Raquel Marcos Fernández se centró en la Escherichia coli, una bacteria ‘comensal’ habitual en el intestino humano y algunas de cuyas cepas pueden ser patógenas.
La becaria ha trabajado con cepas que producen genotoxina, una sustancia que induce daños en el ADN. Marcos presentó la metodología que ha puesto a punto en el transcurso de su investigación.
En este modelo usó una bacteria Lactobacillus Rhamnosus y ha usado anticuerpos contra una proteína de la pared de esa bacteria. La marcó con fluorescente y la identificó con técnicas de citometría (tecnología biofísica basada en la utilización de luz láser para el recuento y clasificación de células). Después hizo lo mismo con otra bacteria, la Lactobacillus Acidophillus .
Con un método de separación magnética consiguió retirar y separar del resto una proteína específica extraída de una muestra fecal. «Es una mezcla compleja y es muy importante porque en el futuro se podría modificar la microbiota intestinal».
Lo que se busca es que en el futuro, una vez detectada la bacteria patógena o beneficiosa, esta se pueda retirar o añadir para enriquecer y proporcionar una suerte de microbiota a la carta. La patente que se registrará próximamente está relacionada con este modelo y con la Scherichia Coli, que contiene la colibacterina.
«Existen evidencias científicas de que la microbiota intestinal influye en el cáncer colo-rectal, la obesidad y enfermedades como la artritis reumatoide», explicó Lucía Guadamuro Sánchez. Es lo que se llama «disbiosis intestinal» por alteración de la microbiota, bien porque unos grupos de bacterias están ausentes de la misma, bien porque otros están incrementados en exceso.
Actualmente, diversas investigaciones como la que se realiza con los fondos aportados por la sociedad leonesa a través de la AECC están dilucidando la relación y los mecanismos. La AECC aporta más de 700.000 euros a diversos proyectos de investigación en curso bien mediante becas, bien con su contribución a la Fundación Científica de la asociación, que actualmente tiene en marcha más de 250 proyectos dotados con 50 millones de euros.
Naiara Cambas Rubio, responsable de Relaciones Externas de dicha fundación, explicó a la audiencia leonesa todos los frentes en los que trabaja la investigación para combatir el cáncer, desde la prevención hasta la metástasis. El estudio de resistencias, la clasificación... «todo ello sirve para que un único paciente pueda ser tratado sin necesidad de tener que ir a Barcelona o a otros sitios. Todo el conocimiento está preparado para el beneficio de todos los pacientes», señala Cambas. Y es que «la investigación de hoy es la medicina de mañana», subrayó.
Serafín de Abajo, presidente de la AECC en León, destacó la importancia de que la sociedad leonesa perciba el retorno del dinero que dedica a la investigación a través de su programa de becas y en colaboración con la Fundación Científica. Recordó que a primeros de año serán seleccionados nuevos proyectos para proseguir con el programa.