Injerto capilar en Turquía: las dudas más frecuentes antes de la operación
La alopecia es uno de los grandes problemas del hombre moderno, sobre todo, en los países occidentales. Se cree que además del componente genético, la mala alimentación, el tabaquismo y otros hábitos de vida poco saludables pueden acelerar el proceso de pérdida de cabello y desembocar en una calvicie inminente, antes incluso de lo socialmente esperado.
Frente a este tipo de desdichas masculinas, los trasplantes de pelo se han erigido en la única solución factible y fiable para recuperar la densidad de pelo de los años más prósperos (capilarmente hablando). Aunque esto no significa que sea la vía más sencilla hacia una melena frondosa. Las dudas sobre los requisitos , las técnicas utilizadas y la eficacia de los resultados asaltan a todos los que se plantean cruzar el Mediterráneo para someterse, por ejemplo, a un injerto capilar en Clinicana Turquía , uno de los centros especializados más prestigiosos de Estambul.
Para tomar la decisión con garantías y conociendo todos los entresijos de este tipo de intervenciones estéticas, damos respuesta a las preguntas más frecuentes que asaltan a los futuros pacientes de las clínicas turcas de trasplante de pelo.
¿Quién puede plantearse la opción de un injerto capilar en Turquía?
A grandes rasgos, todos los hombres y mujeres mayores de edad, que gocen de buena salud y que dispongan de una zona donante de folículos apta. No se puede olvidar que la alopecia es un problema capilar que afecta tanto a la población femenina como a la masculina, aunque es esta última la que suele presentar mayores porcentajes de incidencia de la calvicie y, en consecuencia, mayores trastornos de autoestima.
En cualquiera de los casos, las clínicas especializadas y oficialmente reconocidas por el Gobierno turco para este tipo de intervenciones realizan una valoración previa de todos los candidatos. ¿Qué tienen en cuenta? Además del estado de salud, dolencias y medicación, se fijan en la calidad y la cantidad de los folículos de la zona donante (la de la coronilla) y el espacio que se necesita cubrir en la zona receptora. Además, con la edad y la morfología de la cara, el equipo médico también decide (previa aprobación del paciente) dónde se va a situar la nueva línea frontal del pelo.
¿Qué técnicas de trasplante de pelo existen?
La primera de las técnicas utilizadas para las operaciones de injerto capilar, tanto en Turquía como en otras partes del mundo, fue la FUT (Follicular Unit Transplantation) . Este método consistía en extraer una parte del tejido de la zona donante para conseguir intactos todos los folículos necesarios.
Al ser más dolorosa e invasiva, los especialistas médicos decidieron sustituirla e investigar otra con resultados similares pero menos incómoda. Desde entonces, la gran mayoría de las clínicas de trasplante capilar se decantan por la FUE (Follicular Unit Extraction) , una intervención que supone la extracción de los folículos uno a uno y su posterior implantación en la zona afectada.
Dependiendo del grado de alopecia del paciente, algunos centros han empezado a recurrir también al plasma rico en plaquetas (PRP) para el proceso de recuperación capilar. Es una técnica muy novedosa y mucho menos invasiva. Se puede utilizar como complemento del trasplante o como método independiente para recuperar el grosor del cabello y retrasar su pérdida definitiva.
¿Qué pasos sigue el paciente desde que llega hasta que abandona Turquía para un trasplante de pelo?
Cuando una persona dice sí a un injerto capilar en Turquía en una de las clínicas oficialmente certificadas, debe saber que estará acompañada desde el mismo momento de su llegada hasta su partida. Es decir, antes, durante y después de la intervención, el personal del centro estará a su entera disposición para asegurar una estancia con todas las comodidades y un buen resultado del trasplante de pelo.
Antes de iniciar ningún proceso, el cirujano o dermatólogo encargado se reúne con el paciente para comprobar el estado de su cuero cabelludo, someterle a una serie de análisis básicos y proporcionarle instrucciones para el día de la intervención y para los posteriores. Durante la operación de injerto de pelo mediante la técnica FUE, todo el personal presente debe contar con la formación y la experiencia adecuada. Solo así será posible asegurar la calidad y la supervivencia de los folículos trasplantados.
Una vez concluida la operación, el paciente debe permanecer un par de días más en Turquía para seguir el protocolo posoperatorio y, sobre todo, asegurar que se encuentra en perfectas condiciones para volver a casa.
¿Cómo es la recuperación capilar después de un injerto de pelo en Turquía?
En la primera consulta, un buen cirujano o dermatólogo ya debe informar sobre las posibilidades reales de trasplante capilar en cada paciente e ir adelantando cómo serán los resultados. En cualquier caso, una vez que se inicia el proceso, desde el día de la intervención hasta la percepción del nuevo cabello pueden pasar meses.
En este sentido, las clínicas especializadas y reconocidas subrayan que es posible que, durante las primeras semanas, el pelo que nace de los folículos trasplantados se vuelva a caer. A partir del cuarto mes, añaden, ya empieza a crecer cabello muy fino en la zona intervenida pero no será hasta pasados los nueve o doce meses cuando se vean resultados satisfactorios . Por eso, recomiendan paciencia y confianza.
¿Cómo evitar engaños con los trasplantes de pelo en Turquía “low cost”?
Someterse a un injerto capilar ha dejado de ser un tema tabú y una utopía para convertirse en un lujo al alcance de todos los bolsillos. Tanto por la normalización que ha conseguido de la mano de algunos personajes públicos, como por la proliferación de clínicas en Turquía que ofrecen el servicio a precios mucho más reducidos que los de los centros españoles.
Es aquí donde se deben extremar las precauciones para no poner en peligro la salud. Antes que el precio, quien decida viajar a Estambul para poner remedio a sus problemas de alopecia, debe elegir la clínica en función de sus reconocimientos y certificados de calidad. Estas intervenciones deben ser realizadas por profesionales médicos especialmente formados para ellas y con experiencia reconocida. Las fotos del antes y el después sin una garantía oficial no sirven para nada.