«El cáncer te confronta con la vida y la muerte»
El ingeniero Ángel Manuel Arias habla hoy de cómo convivir con la enfermedad
Es ingeniero de minas, abogado, poeta y pintor. Ángel Manuel Arias se enfrentó hace cuatro años a un diagnóstico de cáncer con metástasis ósea. El pronóstico era malo. Tras pasar por la quimioterapia entró en el quirófano. Estaba aún convaleciente en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid cuando un día se puso a escribir y le salió un soneto.
Los endecasílabos fluyeron de su pluma durante sesenta días. Con sus cuartetos y tercetos. La Asociación Española contra el Cáncer (AECC) le animó a publicar un libro y así nació Sonetos desde el hospital , una obra «de compromiso no tanto poético como con la Asociación Española contra el Cáncer», matiza.
Hoy llega a León con 50 ejemplares en la maleta. Casi los últimos de los 1.000 que editó por su cuenta y riesgo y que supondrán una ayuda de 5.000 euros para la AECC. Ángel Manuel Arias, ovetense militante, leerá algunos de sus sonetos de este libro ilustrado por él mismo después de la conferencia ‘Convivir con el cáncer’ que pronunciará en la sala Región del Instituto Leonés de Cultura (calle Santa Nonia, 3) a partir de las 20.00 horas.
Consejo
"A los médicos les digo que se pongan en el lugar de los pacientes con cáncer"
Consejos a pacientes, a familiares y acompañantes, así como a facultativos forman parte de un segundo libro que escribió a partir de su propia experiencia y en el que revisó más de un centenar de publicaciones de personas que han pasado por la experiencia del cáncer.
«Hago análisis, crítica y ayuda para ayudar a entender lo que es la enfermedad», explica. La cuestión fundamental, asegura, «es que a diferencia de otras enfermedades, el cáncer te confronta con la vida y con la muerte. Puede ser cure o que se cronifique... pero, desgraciadamente, también puede que no. Uno no puede sustraerse a esa tensión emocional», apostilla.Ángel Manuel Arias se hizo ingeniero de minas por tradición familiar, trabajó con su padre en las minas de wolframio y caolín de Asturias. También estudió Derecho. Sigue en activo en ambos oficios. «Hoy estoy en Cantabria saliendo de un juicio y mañana tengo tratamiento en Madrid por la mañana», comenta. Después viajará a León
«Mantenerse activo es una manera de estar vivo. Me encuentro bien a pesar de tener un cáncer grave», señala para explicar que, en la medida de sus fuerzas, no da tregua a la actividad diaria que se le presenta. «No hay que dejarse caer», subraya.
Esta actitud frente a la enfermedad, comenta, es una forma de vida y «una manera de animar a la gente y de dar ejemplo. Sólo tenemos una vida», recalca.
A los acompañantes y familiares aconseja «aprovechar para decirle al paciente todo lo que se le quiere. Sería tremendo que no recibieran la manifestación de afecto». Y a los médicos, algo que entienden muy bien los profesionales de la sanidad cuando se convierten en pacientes: «Ponte en su lugar. La sensibilidad que desarrolla un facultativo cuando pasa por el cáncer, le baja del pedestal».
Ángel Manuel Arias lo ha comprobado porque ha revisado más de un centenar de libros escritos por personas que pasaron por el cáncer, como es su caso.
La poesía es un «un refugio ante las cosas que no sabes». Una forma de afrontar el caos, como le explicó un día el poeta y arquitecto Joan Margarit: «En el mundo domina el segundo principio de la termodinámica, que es el caos, y el ser humano para tener un poco de calma tiene dos opciones. En lo que se puede controlar, ayudar a que las cosas estén en orden y en lo que no se puede controlar, la poesía, la religión, la filosofía o la música» son algunos de los caminos.