La guitarra más cara de la historia
Pagan en una subasta 5,4 millones de euros por el instrumento acústico que Kurt Cobain tocó en el mítico concierto ‘Unplugged’ de Nirvana de la MTV en 1993
Lloyd Chiate posa con la guitarra de Kurt Cobain subastada por 5,4 millones de euros. ETIENNE LAURENT
La guitarra que el legendario Kurt Cobain utilizó en el no menos mítico concierto Unplugged de Nirvana en 1993, para la MTV, se ha vendido por 5,4 millones de euros (6 millones de dólares), un precio récord. Se remató en 5 millones de dólares, pero su precio subió hasta los 6 con la comisiones y gastos. Superó ampliamente la estimación inicial de la firma Julien’s, de Beverly Hills, organizadora de la subasta y que fijó el precio de salida del instrumento en un millón de dólares, unos 900.000 euros.
Hasta ahora la guitarra más cara de la historia era una Fender Stratocaster, bautizada como Black Strat que utilizó David Gilmour, el guitarrista del grupo británico Pink Floyd. Fue vendida por el propio músico por 3,5 millones de euros en una subasta organizada en junio de 2019 por Christie’s con fines benéficos.
La guitarra de Cobain se subastó el sábado pasado. El comprador fue el empresario australiano Peter Freedman, fundador de Rode Microphones, según confirmó Julien’s. El empresario, que estaba en la sala, dijo que pretende presentar el instrumento en varias ciudades del mundo, en exposiciones con fines benéficos en apoyo al mundo del espectáculo.
La guitarra semiacústica de Kurt Cobain es un modelo raro, el D-18E fabricado por la firma estadounidense Martin y del que existen solo 302 ejemplares. El instrumento se vendió con su estuche, personalizado por Cobain, y con tres resguardos de consigna de equipaje.
El concierto Unplugged (desenchufado) donde Cobain usó su guitarra se grabó en Nueva York el 18 de noviembre de 1993. Fue un hito al celebrarse en el apogeo de Nirvana, grupo de rock liderado por Cobain, referencia del movimiento grunge , crucial para la música de los años 90 del siglo pasado. Respondía a las reglas de la emisión Unplugged de la cadena estadounidense MTV, que quería que los invitados a esas sesiones usaran solo instrumentos acústicos o semiacústicos. Se registró menos de seis meses antes del suicidio del depresivo Kurt Cobain en 1994.