La Asociación Médica Mundial apunta a una "oleada permanente" de coronavirus
La Asociación Médica Mundial (AMM) considera que Alemania y otros países afectados por el Covid-19 no están viviendo actualmente una segunda oleada de la epidemia de coronavirus, sino una oleada permanente. En declaraciones a la emisora pública Deutschlandfunk, el presidente de la AMM, el alemán Frank Ulrich Montgomery subrayó que no le gusta el concepto de segunda oleada porque acabará diluyéndose y dará pie a hablar de un tercero, cuarto y hasta quinto repunte de la enfermedad. "Estamos ante una oleada permanente y este problema nos acompañará también durante mucho tiempo", destacó hoy Montgomery. El jefe de la organización independiente fundada en 1948 y que agrupa a colegios médicos de todo el mundo comentó que cualquier aumento mínimo de las infecciones debe ser tomado como una señal de alarma para actuar inmediatamente contra la propagación del virus . Para los especialistas de la AMM el gran problema del coronavirus es su largo proceso de incubación.
También la rapidez de propagación preocupa a la AMM. Que "se transmita de persona a persona vertiginosamente", señala su presidente, quien subraya que "tenemos la posibilidad de interrumpir esas cadenas de contagios si nos comportamos de manera sensata".
En cuanto a la gestión hasta ahora exitosa de la epidemia en Alemania comenta que ha conducido a un "paradoja preventiva". Montgomery subraya que "hasta ahora hemos sido muy buenos en evitar un desbordamiento de las capacidades y muy buenos en motivar a la población para que secunde las restricciones. Hemos alcanzado un gran logro en la primera oleada del coronavirus que el mundo envidia. Por ese motivo algunos dicen, entre ellos los seguidores de las teorías conspirativas, que aquí no ha pasado nada, que esto no ha sido más que una gripe común". Sin embargo advierte de que no hay que bajar la guardia. "Miren los féretros acumulados en Italia, los contenedores frigoríficos en Nueva York o las fosas comunes en Sao Paulo, entonces sabrán de lo que es capaz la enfermedad. Debemos seguir evitando que algo así suceda aquí", afirma Montgomery.
Por ese motivo critica a los participantes en manifestaciones contra las medidas preventivas como la del pasado fin de semana en Berlín, donde miles de personas renunciaron al uso de mascarillas y a guardar la distancia de seguridad física. "Fue una conjunción de seguidores de teorías conspirativas y de negacionistas de la realidad. De idiotas enajenados. Tienen derecho a manifestarse y a expresar en alto su opinión, pero no es sensato escucharles y secundarlos", agrega el presidente de la AMM, defensor de la aplicación de multas severas a quienes atenten contra las normas de higiene para evitar la propagación de la enfermedad .
También el virólogo alemán Hendrick Streeck considera que no se está produciendo ni se va a producir una segunda oleada de infecciones de coronavirus en Alemania. "Lo cierto es que 'segunda ola' no es un término epidemiológico, sino que surgió durante la gripe española hace un siglo que, tras una primera oleada de contagios resurgió en otoño con mayor fuerza aún", señala el científico de Bonn en declaraciones al portal T-online. "Por ese motivo encuentro más adecuado el término 'oleada permanente'. Las infecciones no van a desaparecer y debemos aprender en cambio a integrar el virus en nuestra vida diaria", agrega el experto, quien recuerda que, como en el caso de otros coronavirus, siempre se produce en verano una remisión de las infecciones, que aumentan habitualmente en primavera, otoño e invierno. "Fuera de brotes repentinos no se observa además ahora un incremento de los contagios y tampoco veo venir un aumento de los casos como sucede ahora en España", afirma Streeck.
Por otro lado, la Sociedad Hospitalaria Alemana considera que las clínicas y hospitales del país se encuentran bien preparados para afrontar una nueva oleada de contagios de Covid-19. "Disponemos de un elevado número de camas de cuidados intensivos y salas de aislamiento libres. También las reservas de ropa de aislamiento para el personal médico son mucho más mayores que al comenzar el año", destaca el jefe de la sociedad, Georg Baum, en el diario 'Rheinischen Post', en el que subraya que además los profesionales sanitarios han acumulado una gran experiencia en los últimos meses que les permitiría afrontar un repunte de la enfermedad.
También el presidente de los colegios médicos alemanes, Klaus Rheinhardt, se muestra confiado en el mismo rotativo de la capacidad del sistema sanitario alemán para afrontar una nueva oleada de contagios, toda vez, que en la primera no llegó a verse saturado. "La atención médica de la población en hospitales y consultas médicas está garantizada", subraya Rheinhardt.
Fútbol alemán
El plan de los equipos de la Bundesliga alemana de fútbol de iniciar la nueva temporada en septiembre con público en los estadios ha abierto un fuerte debate entre políticos y en los medios, si bien serán los primeros los que decidirán finalmente sobre la iniciativa de los clubes. Esta contempla, entre otras cosas, celebrar los encuentros sin aficionados del equipo visitante, emitiendo entradas personalizadas para rastrear inmediatamente posibles focos de la enfermedad, con las gradas para los espectadores de pie cerradas, guardando el resto una distancia física de seguridad mínima y prohibiendo totalmente el consumo de alcohol en los estadios, todo un sacrificio este último para los fans alemanes acostumbrados a consumir ingentes cantidades de cerveza durante los encuentros.
Sin embargo, líderes políticos como el primer ministro de Baviera, Markus Söder, se han mostrado escépticos ante la propuesta y consideran que el aumento de los contagios registrado en Alemania en las últimas semanas "hace difícilmente imaginable" que se autoricen partidos con espectadores en las gradas.
Las autoridades regionales alemanas han decidido actuar de manera consecuente y drástica contra quienes atenten contra las normas de higiene para afrontar la epidemia de coronavirus. El estado federado de Renania del Norte-Westfalia, el más populoso de Alemania, multará con 150 euros a quienes no lleven puesta la mascarilla en los transportes públicos. Hasta ahora solo se multaba a aquellas personas que, pese a ser advertidas de la obligatoriedad de llevar puesto el protector bucal y nasal se negaban a utilizarlo. "Se han acabado las discusiones con los que no llevan mascarilla, el que no la lleve puesta será expulsado en la siguiente parada y tendrá que pagar la multa", afirma el ministro de Transportes de dicha región, Hendrik Wüst, en declaraciones al diario 'Rheinischen Post'.