Un monolito de dignidad
Evelio Fernández, sobrino de Genara Fernández García, tuvo que rematar con sus propias manos el monolito que se erigió en Cirujales el pasado 10 de julio en memoria de todas las represaliadas en la comarca de Omaña durante la Guerra Civil. La placa fue costeada por el Ayuntamiento de Murias de Paredes y la piedra de granito por Emilio, el familiar que ha tirado del carro para encontrar, exhumar y retornar a Genara al lugar que le corresponde con dignidad. Ni la Junta Vecinal de Cirujales, cuyo presidente estuvo presente en el homenaje, ni el Ayuntamiento de Riello, al que pertenece Cirujales, han colaborado económicamente con este monumento. Han sido manos voluntarias y personas con ganas de hacer las cosas bien quienes han rematado la dignidad de la memoria.