lo nuevo de prada
Aunque parezca difícil, este año 2020 también tiene algunas cosas buenas y, sin duda, una de ellas es poder disfrutar de una nueva añada del Maceración, cosecha del Palacio de Canedo
El amante del buen vino está de celebración. Y no es para menos porque llega el primer Mencía de la cosecha 2020 del Palacio de Canedo
Y es que no todo son malas noticias en el 2020. La buena de este otoño es que la naturaleza nunca falla y, tras un año duro, también en lo enológico, la tierra agradecida nos ha dado lo mejor de sí, esa maravillosa mencía transformada en un vino joven, fresco, que invita a disfrutar… El Maceración 2020 de Prada a Tope.
Noviembre es, desde hace 29 años, el mes en el que se descorcha el primer Mencía de la cosecha, el Maceración y, con el vino, viene su fiesta: más de un millar de personas brindando con Maceración al son de la música y disfrutando de ricas viandas y, por supuesto, de un pregonero de excepción. Este año no ha podido ser. Las condiciones sanitarias derivadas de la pandemia de coronavirus así lo exigen, pero lo que no nos quitará nadie es poder disfrutar del Maceración en la intimidad. Eso también tiene su aquel... Todos los amantes del Maceración podrán disfrutar desde este de momento de él.
Ya está disponible en su tienda online www.latiendadepradaatope.es y se puede adquirir con un pack muy interesante que invita a recrear y compartir con familia y amigos.
También estará disponible en la tienda del Palacio y, por supuesto, en muchos establecimientos de la provincia. Y los que quieran disfrutar del otoño del Bierzo desde el Palacio de Canedo encontrarán también una oferta para alojarse en una de sus catorce habitaciones, cena y un maridaje con cata vertical del Maceración, una experiencia muy atractiva que solo unos pocos podrán disfrutar.
El Maceración de Prada, de agricultura ecológica, es la referencia de los vinos jóvenes del Bierzo, ya que al ser el primero es el que anuncia cómo van a ser estos nuevos mencías de la añada 2020.
El Maceración es un vino que lleva una elaboración muy especial, manteniéndose los racimos durante unos días en las cubas, macerando enteros, sin despalillar, antes de continuar el proceso de fermentación. Esto aporta toda la frutosidad de la piel al mosto, provocando un carrusel de aromas que elevan la singularidad del Mencía a su máxima expresión, ya que no todas las variedades se prestan para esta elaboración artesanal.
Este año la etiqueta la protagonizan las hojas del arce plateado, que se suman al castaño, roble, peral de monte y abedul que ilustraron las cosechas anteriores. Es la forma de divulgar y reivindicar los árboles del Bosque Didáctico de la Fundación Prada a Tope.