Un viaje a 1918 para entender los cuidados actuales
Néstor Serrano y Elena Andina analizan la labor enfermera en la Primera Guerra Mundial
Los enfermeros Néstor Serrano Fuentes y Elena Andina Díaz, del Grupo de Investigación ‘Salud, Bienestar, Ingeniería y Sostenibilidad Sociosanitaria’ (Salbis) de la Universidad de León acaban de publicar una investigación con carácter histórico, donde identifican y reflexionan sobre los cuidados de salud que se impartían en el Hospital de Netley, Inglaterra, durante la Primera Guerra Mundial. Serrano Fuentes pertenece además a la Universidad de Southampton y Andina Díaz al departamento de Enfermería y Fisioterapia de la ULE.
La publicación se titula Exploring The Netley British Red Cross Magazine: An example of the development of nursing and patient care during the First World War (Explorando la revista de la Cruz Roja Británica de Netley: un ejemplo del desarrollo de la enfermería y la atención al paciente durante la Primera Guerra Mundial) y está disponible en Nursing Inquiry , una de las revistas científicas de enfermería más prestigiosas del mundo.
El de Netley fue el hospital militar británico más grande de todos los tiempos; un lugar de atención a los soldados heridos y de educación sanitaria militar. Tras estudiar durante meses fuentes documentales históricas de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, los resultados del trabajo muestran algunos de los diferentes roles de las enfermeras y la influencia de los factores ambientales en la prestación de cuidados a los soldados. «Todos los cuidados básicos que vemos como normales hoy en día, tuvieron un origen y fueron evolucionando y mejorando con el tiempo. Las revistas de Netley nos muestran a través de poemas, ilustraciones e historias contadas en primera persona algunos aspectos como el sigilo de las enfermeras durante los turnos nocturnos, preocupándose por la luz, el ruido, monitorizaban cómo y cuánto comían los pacientes, sus constantes vitales, se encargaban de administrar medicación correctamente, escuchaban y conversaban empáticamente con los soldados heridos influyendo en el bienestar de su salud mental o se encargaban de que sus pacientes llevaran la talla correcta de pijama, que les permitiera respirar holgadamente con infecciones respiratorias».
Aplicables ahora
El trabajo muestra información aplicable a la actual pandemia del coronavirus. «Las presentes recomendaciones de salud pública destacan la importancia de los espacios abiertos, de la ventilación, del aire fresco, la luz solar o el espacio físico entre las personas. Todas estas medidas de carácter «ambiental» se visualizan en las revistas de 1918 que analizamos, de hecho, se tuvieron en cuenta para diseñar las nuevas partes del hospital y mejorar los cuidados de salud a los soldados, un pensamiento revolucionario. Estas medidas «higienistas y ambientales» surgieron con mucha fuerza en el siglo XIX a través de personajes históricos como la enfermera británica Florence Nightingale (considerada la creadora de la enfermería moderna) y otros personajes coetáneos de la época. Los autores desvelan que hay claros indicios de que el pensamiento revolucionario de Florence Nightingale se infiltró en los acontecimientos de Netley durante la Primera Guerra Mundial. «Resulta relevante ver que recomendaciones actuales en la pandemia, que aún tienen muchos detractores, son medidas que ya se implantaban hace 100 años para evitar otro tipo de infecciones y enfermedades, y funcionaron. La historia se repite, para bien y para mal. No está de más, mirar de vez en cuando al pasado, para ver en qué se fijaban las personas por entonces, cómo actuaban y pensaban. Quizás todo eso nos ayude a reflexionar, buscar ideas o respuestas a problemas presentes y servirnos de inspiración para el futuro».
Los investigadores Néstor Serrano y Elena Andina. DL