Diario de León
DR20P8F1-19-26-07-2.jpg

DR20P8F1-19-26-07-2.jpg

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Todo aquello que sirve para ungir o untar se conoce como ungüento. Históricamente han sido un recurso muy valioso a la hora de tratar diversas problemáticas que afectan a nuestra piel.

Su término en latín es ‘unguentum’ y los más conocidos son los ungüentos medicinales, que nos traen a la memoria los remedios de las abuelas o los antiguos boticarios.

Alguna reseña

El uso de los ungüentos medicinales o cosméticos es conocido desde el año 1400 aC en el antiguo Egipto, donde ya se utilizaban este tipo de fórmulas, para extraer y aplicar los principios activos de las plantas de forma tópica sobre la piel.

De igual forma elaboraban ungüentos con plantas que tenían gran poder antiséptico y los se utilizaban para embalsamar. Por lo que eran codiciados por toda la población, y los que trabajaban en esta profesión se sometían a intensos registros y controles antes de salir y entrar al trabajo.

También, se usaban los ungüentos como perfumes. Estos perfumes no son como los que conocemos en la actualidad, pero fueron el comienzo de un arte que poco a poco se ha ido perfeccionando con el paso del tiempo.

¿Para qué se utilizan

los ungüentos?

El ungüento en definitiva es un remedio indispensable para tratar las diferentes zonas cutáneas.

Cuenta con grandes propiedades algunas de ella son: analgésicas, antibacterianas, anti-inflamatorias, antiespasmódicas, antioxidantes, antisépticas, astringentes, calmantes, emolientes, hidratantes, hipoalergénico, humectantes, nutritivas, regeneradoras, relajantes y tonificantes.

Dependiendo de la problemática que se tenga se puede echar varias veces en el día.

Ayuda a forman una barrera protectora sobre la piel, ya que mantiene la humedad, además los principios activos naturales de estos se van absorbiendo de manera gradual, permitiendo unos tratamientos más eficaces.

Es muy recomendado para tratar las dolencias musculares, siendo ésta, una de las molestias de salud que más afectan a las personas de todas las edades.

La aplicación de ungüentos caseros sobre los músculos es una de las terapias alternativas para disminuir el cansancio, la rigidez y el dolor ocasionado por las lesiones y el exceso de actividad física, gracias a su composición antiinflamatoria y calmante.

¿Cómo se utilizaN?

Siempre recomendamos aplicar el ungüento por la mañana y noche con un suave masaje para facilitar su penetración. También ayuda en la recuperación de prácticas deportivas, como en el caso de «las manos de los escaladores», o «ampollas del corredor». En estos casos es fundamental que lo apliquemos después de la actividad.

Su preparación

Los ungüentos son soluciones con consistencia semisólida compuestos por mezclas de aceites, ceras y/o mantecas vegetales macerados con plantas medicinales. En su preparación, siempre tenemos que tener en cuenta el tipo de afección a tratar y el lugar de la aplicación.

La importancia de la cera de abejas en la elaboración del ungüento

La utilización de la cera es importante, ya que es analgésica y antiinflamatoria, que además proporciona propiedades antisépticas al ungüento y asegura que dure por mucho más tiempo. Otorga dureza a la mezcla con aceites vegetales.

La cera también es la encargada de atrapar la humedad y proteger a las células de la piel del daño causado por factores ambientales. No obstante, también suaviza la piel y crea una capa protectora de larga duración.

Naturkamo, escuela de

cosmética natural de León

tracking