Boliden recurrirá la multa del gobierno español por la catástrofe ambiental de Doñana

El consorcio sueco-canadiense Boliden-Apirsa recurrirá la multa de más de 45 millones de euros que el gobierno español le impuso el pasado viernes por la mayor catástrofe medioambiental ocurrida en España, informaron ayer a medios españoles los abogados del consorcio minero. El 25 de abril de 1998 reventó un depósito de residuos piríticos de la mina sevillana de Aznalcóllar, administrada por Boliden-Apirsa. Esto provocó un vertido al río Guadiamar de cinco millones de metros cúbicos de lodo que contenían arsénico, mercurio y cadmio, entre otros metales pesados. La catástrofe tuvo lugar en las cercanías del Parque Natural de Doñana, una de las mayores reservas de pájaros de Europa. Según los abogados de Boliden-Apirsa, la empresa no es responsable del desastre. La suma impuesta por el gobierno incluye indemnizaciones por daños al dominio público hidraúlico, así como reposiciones de los lugares afectados, entre ellas la retirada de lodos, expropiaciones forzosas y la impermeabilización de la Marisma de Doñana. Por otra parte, la presidenta del PP-A, Teófila Martínez, emplazó ayer a la Junta de Andalucía a que «reclame» a Boliden, «los recursos públicos que le aportó para el mantenimiento de la actividad y de los puestos de trabajo», ya que finalmente la planta cerró en octubre de 2001.