Un vacío para recibir al año 2021
La Nochevieja más extraña de nuestras vidas se celebró en todo el planeta con calles vacías para acabar con un año al que todo el mundo quería despedir con desaire
Calles y plazas vacías despidieron un año al que casi todos teníamos ganas de decir adiós y dieron la bienvenida a 2021 con un mensaje de esperanza en todas partes del mundo. Muy pocas personas por las calles por las restricciones de la pandemia pero además con poco ánimo de fiesta y muchas ganas de recibir al año 2021. Nadie por las calles de León, la Puerta del Sol vacía en una plaza que otros años ocupaban hasta 18.000. Casi nadie para escuchar antes de las doce la interpretación por Nacho Cano de la canción de Mecano Un años más , dedicada ayer a las víctimas de la pandemia del coronavirus. Después, en una vacía plaza en la que el reloj más conocido de España, obra de un leonés, dio las doce campanadas, retransmitidas como cada año por las diferentes cadenas de televisión.
Los brasileños dieron una tregua al movimiento intenso de los últimos días en las playas y recibieron 2021 sin los tradicionales espectáculos pirotécnicos y los multitudinarios conciertos musicales, que esta vez fueron prohibidos por las medidas para combatir la pandemia del coronavirus. La icónica playa de Copacabana, en Río de Janeiro y que llegó a reunir en el pasado a más de dos millones de personas en la Nochevieja para recibir al nuevo año, no tuvo esta vez su famosa pirotecnia y fuegos artificiales sobre balsas dispuestas en el mar y que cada año concitan la atención de visitantes de todo el mundo.
Debido a las medidas restrictivas tomadas para combatir la crisis del coronavirus, no se permitió la asistencia de espectadores al espectáculo de Nochevieja en la Puerta de Brandenburgo en Berlín durante el cambio de año.
En Nueva York, la famosa bola de Times Square con la que tradicionalmente se recibe el Año Nuevo, solo tuvo la compañía del personal de producción del evento.
En Australia los fuegos artificiales de Sídney, uno de los espectáculos que abren tradicionalmente las celebraciones del planeta en el Año Nuevo, ya iluminaron el Puente y la Bahía, aunque sin la asistencia de público.