El ministerio pide prudencia
La desescalada avanza pese a que la mitad de las autonomías siguen en riesgo extremo
La desescalada en España coge velocidad sustentada en el importante descenso de contagios de las últimas semanas. Unas más y otras menos, la mayoría de las comunidades ha flexibilizado sus restricciones , aunque el conjunto del país y nueve de ellas permanecen en situación de riesgo extremo (por encima de los 250 casos de incidencia acumulada ). A la vez que ha lanzado un mensaje optimista sobre el horizonte próximo de la pandemia en España, el Ministerio de Sanidad se ha esforzado esta semana en reclamar a las autonomías cautela para no tirar por la borda los esfuerzos realizados para doblar la durísima tercera ola de la covid-19. Pero el mensaje no ha calado igual de bien en todos los lugares.
Madrid es el mejor ejemplo de que los consejos del ministerio no han sido completamente escuchados. Con la segunda incidencia acumulada más alta de España (427 casos activos por cada 100.000 habitantes), sólo por detrás de Melilla, la comunidad presidida por Isabel Díaz Ayuso retrasó desde el jueves el toque de queda de las 22:00 a las 23:00 horas, al tiempo que permitió el cierre de los bares y restaurantes a esa misma hora, con el objetivo de que estos establecimientos puedan servir cenas.
En el lado contrario de Madrid se encuentra, entre otras comunidades, Cataluña, que anunció el viernes que mantendrá hasta por lo menos el domingo 28 todas sus restricciones, como la limitación de la entrada y salida de personas de la comunidad, excepto aquellos desplazamientos adecuadamente justificados, así como el confinamiento de perímetro comarcal y el toque de queda desde las 22 hasta las 6 horas.
Hostelería
Tras el Consejo Interterritorial del miércoles, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, pidió a las comunidades "prudencia" antes de flexibilizar las restricciones. "Seguimos en cifras muy altas y sabemos cuáles son las medidas de restricción que más inciden", dijo Darias, sin citar a Madrid, pero poniendo el foco en la hostelería.
Según los datos de Sanidad, España registra una incidencia acumulada de 294 casos. La caída desde el pico máximo de la tercera ola, 899 casos el 27 de enero, ha sido rápida, pero el país se encuentra todavía muy lejos de los 50 casos por cada 100.000 habitantes que el ministerio establece como un baremo que permitirá relajar las medidas. Ahora mismo, ninguna comunidad se encuentra ni siquiera cerca de esa cifra. Las autonomías con menor incidencia acumulada son Canarias (116), Baleares (136) y Extremadura (140). Además, los epidemiólogos avisan de que es necesario esperar a comprobar el impacto de las nuevas variantes del virus antes de decidir grandes desescaladas.