«No nos damos cuenta de lo romanos que somos»

Paco Álvarez aprovechó el confinamiento para darse un paseo por Hispania. Quería rescatar los nombres de los romanos nacidos en la Península Ibérica. Una historia plagada de héroes, guerreros y conspiradores que se ha silenciado de forma deliberada. Uno de esos personajes es la monja berciana Egeria, ‘descubierta’ en 1903. Romanos de aquí. Historias estupendas de los romanos nacidos en Hispania (La Esfera de los Libros) es una manera de sacar a la luz unos hechos y a unos protagonistas que, según el escritor y divulgador, «nos han robado». Sostiene que la conquista romana de Hispania se ha silenciado, porque «no interesaba a los políticos de siempre».

Sin embargo, recuerda que la España vaciada está llena de yacimientos romanos. «Nuestra riqueza está a nuestros pies», dice. Por las páginas de su libro desfilan desde Trajano —que muy probablemente visitó el campamento de la Legio VII— a Adriano, pasando por Galba, Marco Cornelio Nigrino Curiacio, Anulino o Eriano. Paco Álvarez, que desciende de Pobladura de la Tercia, pueblo de sus abuelos, explica que en lápidas romanas descubiertas en León han aparecido más de 150 nombres distintos de personajes que, en ocasiones, también dejaron huella en otros territorios.

Para el autor de Estamos locos estos romanos, la vida de Egeria, una gran viajera del siglo IV, es una metáfora de la mujer. Un personaje «importantísimo», que en su opinión tendría que tener calles y plazas con su nombre y que, sin embargo, es una perfecta desconocida para la gran mayoría. Y eso a pesar de que es la primera escritora hispana conocida. El único ejemplar de su obra, Itinerarium ad Loca Sancta, preservado durante décadas en la Biblioteca de Montecasino, bombardeada por los nazis, se salvó porque mucho tiempo antes se lo llevó Napoleón. Álvarez cuenta que hasta 1903 no se descubrió que la monja berciana era la autora de ese libro, en el que relata su viaje a tierras de Jerusalén, Alejandría y Siria.

Paco Álvarez rescata la biografía de Egeria con el fin de «crear afición» por el mundo romano. La monja, al final del libro pide: «Dignaos acordaros de mí». Su deseo no fue cumplido.

Romanos de aquí, absolutamente documentado, es un libro divulgativo, que se devora con facilidad, escrito con la amenidad de un discípulo de Eslava Galán, quien animó a publicar Somos romanos, ópera prima de Paco Álvarez, donde descubre que ‘chato’ y ‘chatear’ son palabras tan romanas como el paso de cebra.

El escritor da una vuelta por Hispania y va descubriendo curiosidades, sitios y personajes; a algunos no los conocía de antemano y se topó con ellos en este entretenido recorrido por la España de hace 2.000 años.

Por ejemplo, se encontró con los granadinos Anulino y Eriano —el primero, gobernador de Germania; y el segundo, de Britania—. Sobre Galba, fundador de la Legio VII que dio origen a la ciudad de León, según Álvarez no podemos descartar que naciera aquí o que fuera al menos de familia hispana.

Gran admirador del arqueólogo y escritor leonés Emilio Campomanes, Álvarez afirma que «no nos damos cuenta de lo romanos que somos. Los nombres de los días de la semana y de los meses son romanos. Tenemos un gran patrimonio romano que no conocemos». Recuerda que la conquista de las Galias duró una década, mientras las guerras cántabras y doblegar a los bravos astures que habitaban en buena parte de lo que hoy es la provincia de León costó 20 años.

Uno de sus personajes favoritos es Marco Cornelio Nigrino Curiacio, uno de los dos generales —el otro era Trajano— que el emperador Nerva barajó para sucederle. En el año 98 Trajano se convierte en el primer emperador no itálico de la historia. En ese momento, se pierde el rastro de Curiacio, quizá fulminado por su rival. «En el siglo XIX se encontró una lápida por la que sabemos que fue uno de los cinco militares más condecorados de la historia del Imperio», con un ‘currículum’ «más brillante» que el del propio Trajano. Romanos de aquí no es una sucesión de biografías, sino la historia de escritores, geógrafos, artistas, guerreros… que el escritor va descubriendo a lo largo de un viaje entre Cádiz y Galicia. Romanos nacidos aquí que «escribieron, vivieron y prosperaron en nuestra tierra, pero alcanzaron fama mundial. Hispanos orgullosos de ser romanos», en palabras del autor.

Álvarez también habla de Alucio, el príncipe íbero; o Marcial, el primer humorista de fama mundial; pasando por Séneca, Teodosio, Placidia o Lucio Cornelio Balbo, el primer no nacido en Italia en ser nombrado cónsul en el año 40 a.C. Son los protagonistas de un Siglo de Oro no español, sino romano.

Para ‘conocerles’ Paco Álvarez invita al lector a recorrer de su mano la geografía de la Hispania que les vio nacer, desde Itálica, hasta el último rincón de Galicia, pasando por Astúrica Augusta, Cantabria, Córdoba, Cartagena, Segovia, Tarragona, Calatayud, Extremadura…