Riello natural
El río Omaña a su paso por el municipio de Riello deja rincones tan mágicos como la zona de baño en La Omañuela. Sobre estas líneas, el castillo de Benal que está pendiente de una subvención para poder iniciar su restauración. A la izquierda, la iglesia de Riello y abajo, una de las visitas obligadas, la ermita de Pandorado.
Riello abre su rico patrimonio natural, cultural y arquitectónico a todo aquel que decida acercarse a este rincón leonés que tiene como «espina dorsal» el río Omaña, como apunta el alcalde, Manuel Rodríguez, que también es el presidente de la Reserva de la Biosfera Omaña-Luna, que otorga a este municipio una gran singularidad natural, en la que destaca sus tres figuras de zona especial de protección de aves para la perdiz parda, el águila real y el urogallo cantábrico. La reserva de la biosfera está dentro de la Red Natura 2000 y reconocida como Lugar de Interés Comunitario y cuenta con más de 81.000 kilómetros cuadrados de extensión, gran parte de ellos en el municipio de Riello, con 37 de las 86 localidades implicadas.
Uno de los emblemas de este municipio, el castillo de Benal, donde nació uno de los linajes más conocidos de la provincia de León, los Quiñones, condes de Luna, está pendiente de una reforma a través de una ayuda del Instituto Leonés de Cultura, para recuperar parte de su estructura, como uno de sus lienzos y una torre, y hacerlo visitable junto con la torre del homenaje que aún se mantiene erguida, presidiendo su planta triangular. Todo ello, después de que la familia cediera al Ayuntamiento esta fortaleza medieval para que asumiera su gestión.
La ermita de Pandorado es otro de los símbolos arquitectónicos de este municipio que, además, ha organizado para este verano, hasta el 29 de agosto, un ciclo de visitas guiadas por tres de las iglesias de sus pueblos —Marzán, Valbueno y La Curueña— para dar a conocer sus singulares retablos y ofrecer al visitante una exposición sobre el arte sacro menor.
A finales de agosto se celebrará, a las 17.00 horas en el campo de fútbol de Riello, un corro de lucha leonesa, donde se lucirán los alumnos de la escuela del municipio junto con otros grandes de este deporte autóctono. Otra de las citas claves en el verano del municipio será el concierto del 14 de agosto en la iglesia de Riello.
El municipio omañés está muy vinculado a su riqueza natural, al brío que da el río a su entorno y que, como destaca el alcalde, «fue una gran fuente de riqueza para el entorno». Ahora, continúa siéndolo para el disfrute de los veraneantes y todo aquel que quiera seguir disfrutando de los baños en el río. Así, son tres los enclaves que destacan, por su carácter «acogedor», como señala Manuel Rodríguez: ubicados en el Castro de la Lomba, La Omañuela y El Castillo, además de otras zonas que se reparten en la multitud de afluentes que nutren al río Omaña a su paso por el municipio de Riello. A ellos se suman los cotos de pesca, también ubicados en El Castillo y en La Omañuela.
La naturaleza también ha servido para vertebrar el devenir del municipio a través de la trashumancia, ya que varios de los cordeles que forman parte de la Cañada Real, que nace en Pandorado y concluye en la localidad cacereña de Trujillo, pasan por este municipio de grandes recursos naturales e integrado por cerca de 40 pedanías. Las casas rurales que lo salpican ofrecen así la posibilidad de disfrutar de este enclave leonés.