Nace un bebé de una trasplantada de corazón

Una mujer de 40 años se ha convertido en la primera mujer que da a luz en España tras haberse sometido a un trasplante de corazón. El alumbramiento, tuvo lugar en el hospital Reina Sofía de Córdoba, es también el primer parto en el mundo en el que la madre ha sido tratada con everolimus, un producto experimental para evitar el rechazo del transplante. La niña, completamente sana, pesó al nacer 3.400 kilogramos y el parto se produjo por cesárea, lo que ha supuesto para el equipo médico la confirmación de los beneficios que se desprende de la donación de órganos no sólo para los receptores porque «en este caso la generosidad de un donante ha permitido salvar dos vidas», explicó el jefe de cardiología, el doctor José María Arizón. La singularidad de este caso va más allá de que se trate de la primera mujer trasplantada de corazón que tiene un hijo en España, porque también es el primer nacimiento que se produce en el mundo después de que la madre haya sido tratada con everolimus, un fármaco que en la actualidad se utiliza de forma experimental en el hospital cordobés, en la clínica Puerta de Hierro de Madrid y en el hospital Juan Canalejo de La Coruña. El doctor Arizón explicó que el everolimus es un medicamento de nueva aplicación en personas trasplantadas que se deriva de la rapamisina y que «se aplica para disminuir la respuesta del organismo a una sustancia extraña» y que «teóricamente puede producir defectos en el feto». Completamente normal Sin embargo, el embarazo de esta mujer, que quiere mantener su anonimato, se desarrolló con normalidad y cumplió los nueve meses de gestación. La niña nació completamente sana y «sin complicaciones ni sufrimiento fetal» a través de cesárea que hubo que practicarle, «después de que se rompiera de forma espontánea la bolsa del líquido amniótico y no se iniciara la mecánica del parto». El tratamiento experimental que se ha aplicado a esta mujer con un éxito total se aplica en los tres citados hospitales españoles mediante un protocolo de investigación clínica e incluye el suministro al paciente de corticoides y tacrólimus además de everólimus, mientras que otros tratamientos «más tradicionales» a los que se someten los trasplantados se componen de ciclosporina, corticoides y azatioprina.