PLACENTERA SIESTA GATUNA AL ABRIGO DE LA CALIDEZ DE UNA TARDE OTOÑAL
Un gato perezoso disfruta de una larga y reponedora siesta en el almacén contiguo a la terraza de un establecimiento hostelero. Lo hace ajeno a las sugerencias de la carta del bar y el trajín, las inquietudes y las conversaciones de la clientela.