Los siete años más calurosos de la historia

La Organización Meteorológica Mundial, con sede en Ginebra, ha confirmado que la población del planeta se enfrenta a una situación «de éxito o de fracaso» en la cumbre climática que comenzó el sábado en Glasgow. Los datos presentados en el informe provisional sobre los últimos indicadores del clima llevan a su secretario general, Pettery Taalas, a concluir que «los eventos extremos son la nueva norma» en la evolución del clima.

«Se acumulan las pruebas de que en algunos de estos sucesos —cita incendios en América, lluvias torrenciales en China, inundaciones en Alemania— se percibe la huella de un cambio climático inducido por los seres humanos». Para el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, la conclusión es que «debemos actuar ahora, con ambición y solidaridad, para salvaguardar nuestro futuro y salvar a la humanidad».

En su Estado Provisional del Clima Global 2021, la red internacional de oficinas meteorológicas y otros expertos llegan a la conclusión de que «los últimos siete años van camino de ser los siete más calurosos que constan en los registros». Las emisiones siguen aumentando y, en consecuencia, también aumenta la densidad del CO2 en la atmósfera, 413.2 partes por millón en 2020, y la de otros gases invernadero.

El informe, con indicadores sobre el aumento de la temperatura de los océanos; la evolución del nivel del mar y del hielo marino; así como del clima extremo y las precipitaciones, fue publicado coincidiendo con la apertura de la cumbre. Fue una jornada de trabajo discreto de las delegaciones, masiva acreditación de participantes, manifestaciones de activistas y lluvias fuertes que llevaron a los meteorólogos locales a emitir una alerta amarilla. En el vasto recinto de la conferencia oficial, al que hay que añadir el espacio para las organizaciones no gubernamentales, en la otra ribera del Clyde, se remataban detalles.