Fraga anuncia un fondo de 60 millones para paliar los daños y señala que «todo se va a resolver»
El presidente de la Xunta, Manuel Fraga, anuncio ayer un fondo de 60 millones de euros procedentes de los presupuestos del próximo año para implantar medidas que palíen los daños del accidente del petrolero Prestige y, aunque admitió la gravedad del suceso, aseguró que es «de los que cree que todo se va a resolver». Fraga visitó en la localidad de Caión donde pudo comprobar cómo el fuel del Prestige ha afectado a toda la playa, y en esta localidad mantuvo un encuentro con mariscadores, pescadores y vecinos de la zona. En esta reunión, el presidente gallego anunció que, además del fondo, la Xunta exigirá a la UE medidas como un nuevo corredor para barcos que transporten mercancías peligrosas a un mínimo de cien millas de la costa. En este sentido, apuntó que no ha habido «otra ocasión como ésta para acabar de una vez por todas con estas mafias», en alusión a los buques de conveniencia que transportan mercancías peligrosas sin las mínimas garantías de seguridad. Por otra parte, Fraga anunció que las entidades financieras gallegas se han comprometido a facilitar créditos de interés cero para los afectados por la catástrofe. El presidente gallego aseguró a los marineros que «de ninguna manera están solos» y, ante quienes le han criticado por no haber acudido hasta ayer a la Costa de la Muerte replicó que desde que se produjo el accidente ha estado trabajando y hablando con todas las administraciones para resolver el problema. «Me reprochan hasta que me reúna con los tratantes de petróleo, a los que, por cierto, leí la cartilla en Santiago», durante un simposio celebrado el miércoles, dijo Fraga. Fraga recordó, por otra parte, que, además del fondo gallego, hay ya una orden en vigor para que los afectados puedan pedir ayudas, que comenzarán a pagarse a partir del 15 de diciembre cada quince días. Por su parte el Consejo de Ministros tiene previsto aprobar, en su reunión de hoy, un crédito extraordinario para financiar prestaciones económicas directas, exenciones fiscales y créditos blandos a los afectados por el hundimiento del petrolero Prestige.