Los manifestantes piden la cancelación de los trasvases y que la Generalitat ponga fin al descontrol urbanístico
Miles de personas piden en Valencia al PHN una nueva cultura del agua
Miles de personas, 100.000 según la organización y 5.000 según fuentes policiales, se manifestaron ayer por la ciudad de Valencia en
La manifestación de Valencia es la última etapa de una marcha contra el PHN que se inició el pasado 30 de octubre en la ciudad cántabra de Reinosa y que ha recorrido 1.000 kilómetros en 40 etapas. La protesta, que al final estuvo acompañada de una débil lluvia y transcurrió sin incidentes, también coincide con la celebración en Valencia de la octava reunión de los países que han ratificado la Convención Ramsar para la protección de las zonas húmedas, que se celebra en la ciudad hasta el próximo martes en el Museo Príncipe Felipe de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Asimismo, un grupo con distintivos de la plataforma ''España 2000'', con pancartas con el lema ''El agua es de todos'', insultaron a los manifestantes e intentaron agredir a varios periodistas. La manifestación partió a las 12,00 horas de la plaza de San Agustín de Valencia y tras recorrer las calles más céntricas de la ciudad, llegó hasta la plaza de América, donde se leyó un manifiesto. En el mismo, se criticó que el PHN responda a los intereses de los empresarios, y que se haya realizado «sin consenso». En la cabeza de la manifestación, detrás de la pancarta con el lema de la marcha, figuraban el coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, el coordinador general de Esquerra Unida del País Valencià, Joan Ribó, el presidente de Esquerra Republicana, Carlos Rovira, el presidente de la Chunta Aragonesista, Vicent Fuster, la eurodiputada de Los Verdes-Alianza Libre Europea Marie Anne Isler, el coordinador de Acció Ecologista Agró, Enric Amer, el coordinador de Els Verds-PV, David Hammenstein y el coordinador del Ecologistas en Acción, Carlos Arrivas, entre otros. Asimismo, entre los asistentes a la marcha se encontraban representaciones de los sindicatos UGT y CCOO, colectivos ecologistas y los integrantes de la Fundación Nueva Cultura del Agua, además de manifestantes de Murcia, Andalucía, Aragón, Cataluña, el País Vasco, y de diversos puntos de la Comunidad Valenciana, así como ciudadanos coreanos asistentes a la Convención Ramsar. Según los organizadores, de los cerca de 100.000 manifestantes, «más de la mitad eran valencianos». A lo largo del recorrido de la manifestación se pudieron leer pancartas con lemas como ''Palmo a palmo, día a día, defendientdo nuestra tierra''; ''Por una nueva cultura del agua''; El río se tira, no al trasvase''; ''Els Millars no quiere el agua del Ebro, quiere la suya''; entre otros mensajes contrarios al plan. Sólo se produjo un pequeño enfrentamiento entre los manifestantes y una mujer que les lanzó una botella de agua, que terminó sin consecuencias.