Educación implantará la Ley de Calidad en los próximos cinco años

, que se suman a la Ley de Universidades aprobada el pasado año. La titular de Educación aseguró que estas reformas responden a las demandas «de la inmensa mayoría de la sociedad», y se mostró convencida de que servirán para mejorar la calidad de la formación, para combatir el fracaso escolar, para estimular el esfuerzo entre los alumnos, para facilitar el desempeño de la función docente, y para orientar la formación hacia el empleo. Sobre las medidas previstas en la Loce y su aplicación, la ministra informó de que los trabajos del Ministerio se centrarán durante los próximos seis meses en el desarrollo de los decretos para desarrollarlas, con el fin de «acabar con las incertidumbres». Del Castillo prefirió no adelantar cuáles serán los cursos en los que se pongan en marcha las diferentes medidas como la Prueba General de Bachillerato (reválida) o los itinerarios, o cuándo se eliminará la promoción automática de curso independientemente del número de asignaturas suspendidas, y aseguró que pronunciarse sobre esas fechas antes de que estén definitivamente cerradas sería introducir «más confusión que claridad». La ministra aseguró que el Gobierno ha cumplido sus compromisos «con responsabilidad y sentido del deber político», y destacó además el apoyo social que han tenido los dos proyectos legislativos aprobados este año (Ley de FP y Loce) y los amplios procesos de debate que han acompañado a ambas leyes. Subrayó además el desarrollo a lo largo de los últimos años de las principales medidas de la Ley de Universidades, así como el impulso que España dio durante la Presidencia de la UE en el primer semestre del año a la convergencia europea en materia educativa. Pilar del Castillo destacó en este sentido que la educación se haya configurado como una de las claves de la construcción europea, y recordó que fue en la Cumbre de Barcelona en la que se estableció la Agenda de la Educación.