Se suspenden las celebraciones navideñas en Vélez-Málaga por el siniestro en el que murieron dos niños y su tío
Tres días de luto por el incendio que se cobró la vida de tres personas
La localidad malagueña de Vélez-Málaga recordará, sin duda, estas Navidades como una de las más trágicas desde hace años. Su Ayuntami
Con los fallecidos, también se encontraba Puri, una mujer de 84 años tía del joven fallecido y tía abuela de los pequeños, y a la que también afectó el siniestro. La anciana permanece ingresada en la UVI del hospital Carlos de Haya, en la capital malagueña, donde permanece en estado muy grave, aunque evoluciona favorablemente. La señal de duelo de Vélez-Málaga afectará también, por decisión del poder municipal, a las celebraciones oficiales navideñas, toda vez que ha sido suspendida la fiesta de Nochevieja que el consistorio había organizado en una plaza de la localidad para mañana. Asimismo, como una muestra más del profundo dolor de la población, se decidió apagar el alumbrado navideño de la localidad. El fuego sorprendió a las víctimas a las cuatro y cuarto de la tarde del pasado sábado. Todavía se desconocen las causas que provocaron el incendio, aunque todo parece indicar que fue un brasero el que prendió tan nefasta chispa. A partir de ese momento, se vivieron momentos de angustia entre el vecindario. Los gritos y las continuas llamadas a los porteros electrónicos comenzaron a alertar a los moradores de los inmuebles colindantes mientras se esperaba la llegada de los bomberos, que aún no han podido determinar oficialmente las causas del siniestro. Varios agentes de policía, que en la localidad ejercen como bomberos, tuvieron que ser atendidos por inhalación de humo. Dos sobrinos Las llamas no se propagaron a las casas colindantes. Los vecinos intentaron salvar a las víctimas, pero no pudieron hacer nada por ellas, ya que el intenso humo que había en las escaleras no les dejaba ni ver ni respirar. En un primer momento, una dotación de la Policía Local que pasaba por la zona se personó en el lugar y avisó a Emergencias Sanitarias. Acompañados de vecinos, dos patrullas también intentaron sin éxito acceder a la vivienda. En la casa vivía una señora mayor, Pura, de 84 años, junto con dos sobrinos: Amancio, el joven minusválido de 22 años fallecido, y su hermana Olivia, que no se encontraba en la casa. Su otra hermana vivía con su marido y sus dos hijos, Alejandro, de 6 años, e Iván, de 4.