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EE UU destapa un fraude en telemedicina de 1.200 millones

Publicado por
EFE

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La Justicia de Estados Unidos anunció este miércoles que ha destapado una trama de fraude en el sector de la telemedicina, muy popular tras la pandemia de covid-19, en la que 36 personas a lo largo del país están acusadas de desviar 1.200 millones de dólares.

Se alega que las empresas de telemedicina —cuyo nombre o número no se menciona— acordaban con distintos médicos la prescripción de pruebas y de materiales médicos muy costosos, independientemente de si los pacientes las necesitaban, tras una breve conversación telefónica o incluso sin interactuar con ellos.

La acusación es resultado de una investigación federal coordinada entre el FBI, seis unidades contra el fraude en la sanidad y ocho fiscalías federales, entre otras agencias, y ha dado lugar a los primeros cargos por la facturación de pruebas genéticas cardiovasculares fraudulentas, según una nota oficial.

Los resultados de los tests y materiales médicos encargados a menudo no llegaban a los pacientes, o carecían de valor para sus médicos de atención primaria, agrega el documento.

Imputados

Entre los imputados hay un ejecutivo de una empresa de telemedicina, propietarios y ejecutivos de laboratorios clínicos, empresas de equipamiento médico de larga duración, empresas de márketing y profesionales médicos.

Las autoridades dijeron que los propietarios y operadores de los laboratorios pagaban «mordidas» y sobornos a los médicos que trabajaban en las «empresas fraudulentas de telemedicina» para que les derivaran sus pacientes.

Además, algunos acusados controlaban una red internacional de márketing con la que engañaron a «miles de pacientes ancianos y/o discapacitados» y ordenaron a sus teleoperadores inducir a los beneficiarios del programa público de salud Medicare a hacerse las costosas pruebas genéticas.

El Departamento de Justicia indica además que los tests géneticos cardiovasculares y de cáncer en cuestión eran «médicamente innecesarios», ya que no se usan como método de diagnóstico ni están aprobados por Medicare para revisar de manera preventiva el riesgo de desarrollar enfermedades.