Breve recetario navideño de la cocina local
rEl surtido de entremeses no tiene truco, y la sopa se refuerza según la receta familiar: sopicaldo ligero de ave o brebaje contundente con todo tipo de huesos y carnes (este, con chorrito de alcohol para digerir la grasa). Entre las verduras, en la Navidad leonesa reina porque es su tiempo la lombarda. Aliñada con manzana y piñones es la antesala ideal de la Misa del Gallo.
Si se entra ligero al segundo pase del menú caben siempre los ricos escabeches, remate perfecto de las ensaladas, que se imponen de escarola y con granada. No necesitan más.
Sobre carnes todo está escrito. Aquí el abanico va de los carpaccios de las piezas más finas (lo crudo no es tradición, pero aligera) a los guisos más condimentados en vacuno, cerdos o aves. Y para sencillez sublime, el difícil equilibrio de cocción y tostado de las delicadas paletillas y costillares de los lechales de cordero y cabrito.
De postre, pandereta y villancico. O botella de anís y cuchara. Este año de momento sin pandemia. Con virus sí. Variados también.