Cerrar

Los perros acaparan las bendiciones por San Antón en León

Los animales y sus dueños buscan el favor del santo en una jornada que recupera la bendición individual. Se repartieron 250 de los 300 panes previstos por la Protectora de Animales, organizadora, junto a la Cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y del Silencio, de una tradición en la que las mascotas son las protagonistas.

DL16P26F2-17-45-16-5.jpg

León

Creado:

Actualizado:

Simba llegó hace año y medio al patio de la casa de Raquel, en San Pedro Bercianos. «Estaba abandonada», defiende. Su padre cree que puede ser una de las crías de las gatas que viven en colonias en el campo. «Pero era muy sociable y cariñosa», sostiene Raquel, que defiende que es fruto de un abandono.

En el último año han aumentado los abandonos de gatos en León, algo poco frecuente hasta ahora. Madalena Presa, vocal de Argos, cree que la crisis económica que afecta a las familias puede estar detrás de estas decisiones. «Estamos intentando castrar al mayor número posible de gatos que hay en las calles, con la ayuda del Hospital Veterinario de León. Esterilizamos dos a la semana». Argos tiene cuarenta casas de acogidas para gatos que no sobrevirían en la calle tras un abandono. «La gente piensa que los gatos domésticos se arreglan solos, pero no es así. Los gatos son muy de colonias y no dejan entrar a otros miembros, los atacan y no los dejan alimentarse». En León hay censadas 30 colonias de gatos con unos 300 felinos sueltos por las calles.

La protectora Bastet de San Andrés del Rabanedo, fundada en 2019, controla 15 colonias de gastos en San Andrés, Pinilla, Trobajo del Camino, Villabalter, barrio La Sal, en las cercanías de las vías del tren, en la estación de Adif y frente al Palacio de Congresos. «La captura, la esterilización y el regreso a la colonia es lo que está funcionando mejor», explica la presidente, Isabel Ropero, que ha propuesto este proyecto al Ayuntamiento de San Andrés.

La Protectora de Animales también detecta un aumento de gatos abandonados. «Mucha gente mayor que muere tiene gatos. El otro día recogimos diez de un domicilio tras la muerte de la dueña», asegura la vicepresidenta Ana Aguilar. La protectora ha recogido este año 400 perros abandonados en León, Sariegos, Villaquilambre, Cuadros, San Andrés. Onzonilla y del Centro Canino La Yosa.

A la cita para recibir la bendición por San Antón, patrón de los animales, sólo había dos gastos y un hurón. Todos los demás eran perros.

Los que acudieron a recibir el agua bendita están muy lejos del abandono. Son animales queridos y mimados por sus dueños, que los llevan para cumplir con la tradición y pedir los favores de San Antón. «El señor nos bendiga y San Antón os proteja de todos los males del cuerpo», repitió 250 veces el párroco de San Marcelo, Roberto Da Silva.

Antes, las mujeres del grupo Xeitu cantaron el ramo al santo, trasladado a la calle adornado con una cuelga de rosquillas y frutas.

Beatriz volvió este año con Bjorn, un hurón de 6 años. «Es la mezcla perfecta entre un gato y un perro. Es un buenazo y cariñoso, cosa extraña en un hurón».

Duffy, un chiguagua de 10 años, tiembla entre tanto barullo de gente. Está junto a Irene, de nueve años. «Es lo mejor del mundo», dice de su perro, «aunque a veces es un gruñón».

Tofe es un caniche gigante. Susana y Víctor lo compraron en Guadalajara hace 6 años. «Víctor quería un perro grande y a mí me gustaban los caniches, así que era perfecto. Un perro es para toda la vida y hay que ser muy responsable».

Troy es un perro mestizo adoptado de 11 años. «Se lo cogí a una persona que lo regalaba», recuerda Águeda, su dueña. «Es la primera vez que lo traigo. A mí me hace mucha compañía y es estupendo». Su madre, Elisa, viene con Farah, una galga de 7 años. «La cogimos en la asociación de galgos de León. Es muy buena. A veces se pone nerviosa y se hace pis o da un salto que se sube encima de la mesa. Te aporta una comunicación sin barreras, sin rencor, algo que no tenemos las personas. La mirada de un perro te serena y traspasa barreras».