«Hice lo que tenía que hacer, que era ir contra Franco»
«A mí me detuvieron porque hice algo. A mi padre le detuvieron y no hizo nada. Lo suyo fue totalmente injusto», dice Albina Pérez al recordar el tiempo que estuvo prisionero en San Marcos tras el golpe de 1936 y la escena en la que atravesó una alfombra de hombres para entregarle un bocadillo. «Nunca me he arrepentido». A la pregunta de si está orgullosa responde: «Orgullosa, no; contenta. Hice lo que tenía que hacer que era ir contra Franco». Le gusta que, al fin, alguien se haya acordado de aquellos jóvenes. «Ya era hora, aunque tengo miedo de que se arme jaleo porque la derecha está muy crecida», confiesa. Le parece importante que la juventud de hoy se entere de aquello: «Éramos muy jóvenes también». Le gustaría estar junto a su amigo Nicolás Sánchez-Albornoz, al único además de Mercedes que ha visto después de la detención, pero no se ve con fuerzas de viajar. El homenaje está organizado por las Aulas de Memoria de la Universidad Complutense de Madrid en el que participan profesorado y alumnado. Es el lunes a las 12.30 horas en el Paraninfo de la Facultad de Filosofía.