Una oportunidad única para el sector agroalimentario

El Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) Agroalimentario supone una oportunidad única para impulsar el desarrollo de un sector estratégico en la provincia de León, como es el primario. La Unión Europea pretende movilizar con esta iniciativa 3.000 millones de euros de inversión, que generarán 16.000 puestos de trabajo a nivel nacional. Sin embargo, los requisitos para acceder a estos proyectos son muy exigentes. Para apoyar a las empresas interesadas ABANCA tiene una larga experiencia en el sector a través de su unidad especializada ABANCA Agro, que desde 2015 trabaja específicamente en la agroalimentación con gestores especializados y un catálogo de productos diseñados para el sector.

El PERTE Agroalimentario pretende «transformar el mundo agro en vectores tan relevantes como la competitividad, la mejora de la sostenibilidad o la trazabilidad del producto, bajo los principios de la investigación, la innovación y el desarrollo». Y tiene abierto su plazo de presentación de proyectos hasta el 15 de marzo.

Según explican desde la entidad financiera, el proyecto «ofrece la posibilidad de optar a subvenciones de hasta el 80% del importe de la inversión, e incluye también opciones de financiación sin intereses». Sin embargo, advierten, «esta convocatoria es ambiciosa en sus requisitos, ya que requiere que los proyectos tractores cuenten con un presupuesto de al menos 10 millones de euros, y que impliquen a cuatro compañías de al menos dos comunidades autónomas».

Para abordar estas exigencias ABANCA ofrece «una propuesta de valor» para las empresas interesadas en desarrollar proyectos que puedan acogerse a estos fondos de recuperación para el sector agroalimentario. «Una propuesta a medida de la convocatoria y de cada inversión».

Todo ello se canaliza a través de la unidad especializada ABANCA Agro, que se suma a la unidad creada por el banco para facilitar el acceso de las empresas a los Fondos Next Generation de la UE. Y que «ofrece productos diseñados para cada línea que se activa».

Requisitos exigentes

Desde la entidad explican que los productos que ponen a disposición de las empresas y los proyectos «están creados para cumplir con los requisitos exigidos en las bases, como por ejemplo la presentación de avales para el cobro de las ayudas».

Y a mayores realizan propuestas para cubrir las necesidades de financiación de las inversiones que no están cubiertas por estas ayudas, con préstamos flexibles en plazos, la opción de incluir carencias o anticipos hasta que los fondos se abonen.

La oferta de la entidad financiera de cara al proyecto estratégico de recuperación en el sector agroalimentario amplía la experiencia que ya acumula en el desarrollo de propuestas en el sector primario. El banco ha contribuido en los últimos años al desarrollo de propuestas centradas en el impulso de los cultivos más eficientes, por ejemplo con el amueblamiento de fincas en las zonas de Payuelos y Páramo. Y han trabajado también en la implantación de energías renovables en explotaciones agroganaderas en la provincia de León.

Desde ABANCA señalan que «todos estos retos estratégicos son, precisamente, los desafíos que busca impulsar el PERTE Agroalimentario».

El proyecto de recuperación y transformación económica se plantea sobre el sector agroalimentario como estratégico para la economía, y pretende reforzar la cadena agroalimentaria y dotarla de las herramientas necesarias para afrontar los retos mebioambientales, digitales, sociales y económicos de la próxima década. Y, dada la importancia del sector en el medio rural, pretende contribuir también al afrontar el reto demográfico.

El PERTE no sólo afronta la transformación de la industria agroalimentaria, sino que dedicará, en una convocatoria posterior, un capítulo especial a la mejora de la gestión del agua y la modernización de los regadíos.

Contempla también financiación para el proceso de adaptación digital en todos los agentes que forman parte de su cadena de valor, desde agricultores, ganaderos y pequeñas cooperativas a pymes de producción, transformación y comercialización. Además de medidas específicas para la innovación.