El Rabizo, un pulmón en la montaña central
El polígono industrial de La Robla, con más de 236.000 metros cuadrados de superficie y una treintena de empresas es un motor económico para la comarca. Su ubicación y servicios lo convierten en un atractivo para nuevos proyectos
Perfectamente comunicado y en constante crecimiento, el polígono industrial El Rabizo de La Robla puede presumir por méritos propios de ser el principal eje industrial de la comarca. Su situación geográfica en la zona sur de la localidad se convierte también en uno de sus puntos fuertes. Enclavado en un cruce de caminos, enlaza directamente con el acceso a las carreteras N-630, L-4514 y la CL 626.
Además de la ubicación, el precio de las parcelas es otro de los atractivos de este polígono. Precios competitivos y económicos con todas las garantías para la puesta en marcha de una iniciativa empresarial: suministro eléctrico, red de saneamiento separativa (aguas sucias y pluviales), suministro de gas natural, alumbrado público y servicio de telefonía y telecomunicaciones con fibra óptica.
En la actualidad conforman la actividad del este eje industrial una treintena de empresas, con actividades tan relevantes como la empresa Cementos Tudela Veguín y Cashmetal, centrada en la producción de grandes piezas de hierro fundido y de acero de carbono.
Forja y carpintería metálica, ebanistería, transporte de mercancías, neumáticos, distribución de gasóleo, mecánica del automóvil, suministros industriales y construcción son otros sectores de actividad presentes en un polígono industrial que ocupa una superficie total de 236.579 metros cuadrados, de los cuales 216.787 metros se destinan al uso industrial y 19.69 a si temas generales y zonas verdes.
Además, cuenta con una superficie adicional de 24.140 metros cuadrados consignada a viales y aparcamientos. Un gigante industrial que todavía cuenta con 24.000 metros cuadrados útiles dividios en siete parcelas (modificables y segmentables) totalmente libres y disponibles para la instalación de nuevas empresas. Eso sí, el precio de cada una de ellas varía en función de los puestos de trabajo que se generen con la actividad empresarial
La ubicación, el precio, la oferta industrial de las empresas asentadas y de actividad consolidada, las perspectivas de crecimiento en sucesivas fases de ampliación y la garantía de los suministros necesarios para la puesta en marcha de una empresa son condiciones inherentes a un polígono industrial potente.
Todo para un espacio industrial que sin duda alguna luce como un atractivo y pulmón para la comarca y que cuenta con perspectivas de crecimiento importantes. Son muchos los argumentos que juegan a favor de El Rabizo como queda demostrado en cifras y también en la ubicación de empresas que con el paso de los años será mayor.
Una fuente de riqueza para La Robla y su comarca.