Nueva definición de las vías de acceso al polígono
La ampliación y el desembarco de nuevas actividades, que generan mayor volumen de tráfico, plantean exigencias en la red de carreteras
El proyecto plantea los viales internos. RAMIRO
Los accesos al polígono desde las diferentes infraestructuras viarias de alrededor y, sobre todo, la gestión de un volumen de tráfico creciente y que soporta cada vez más vehículos pesados, constituyen uno de los retos que está en estudio. La situación actual ya es compleja, pero la ampliación de la superficie industrial y la llegada a corto plazo de nuevos proyectos logísticos de gran volumen obligan a afrontar inversiones que desde hace tiempo son urgentes, pero que se muestran ahora inaplazables.
Más de 30.000 usuarios utilizan al día ese tramo de la N-120, y las rotondas de Trobajo y Montejos se hacen ya imprescindibles. Proyectos prometidos hace años, que siguen sin hacerse realidad. Como también el paso del tráfico pesado de la N-120 a la AP-71.
La infraestructura industrial se encuentra en la N-120 y al lado de la AP 71 León-Astorga; y cercano al nudo de autovías de la A-66 hacia Benavente, la A-231 a burgos y la AP-66 hacia Asturias. Además de próximo al aeropuerto internacional y de mercancías de León.
El proyecto
El Plan Regional de Ámbito Territorial plantea en el proyecto de ampliación del polígono de Villadangos del Páramo dos nuevos accesos a la LE-413 (de Villanueva de Carrizo a Valcabado), aunque por el importante tráfico que soporta y que es conexión entre Carrizo de la Ribera y la N-120 y la AP-71, «se está estudiando el cambio de clasificación de esta carretera a la red complementaria preferente».
El proyecto plantea que se realicen dos glorietas de conexión
en esta carretera, a 600 metros de distancia una de otra, «lo que obligaría a al tráfico a ceder el paso dos veces en un intervalo muy corto». Además implicaría la reducción de la velocidad, lo que no se considera viable.
La dirección general establece como «más razonable dirigir el tráfico de la ampliación por la glorieta planteada en el ámbito de la ampliación, próxima a la parte ya construida del polígono existente».
Así, Carreteras estudiará el volumen de tráfico que discurrirá por el polígono actual y su ampliación, dado el carácter interurbano de la LE-413; y además se estudiará la posibilidad de eliminar los giros a la izquierda para canalizar todos los tráficos hacia un único acceso, que no perjudique el tráfico habitual por esa carretera.
Mejoras
Por su parte el Ayuntamiento de Villadangos considera que el sistema general de vías públicas planteado es insuficiente en lo que se refiere al acceso al nuevo polígono, y reclama mejoras en las intersecciones y la ejecución de nuevos enlaces y refuerzos, sobre todo la construcción de nuevas glorietas en el vial V-2 y sobre la N-120.
El proyecto contempla la conexión directa con la estructura viaria del polígono actual y sus calles, y sigue su geometría organizada en dos bandas paralelas. Se apoyan en uno de los viales estructurales del actual área industrial, el Vial V2, a través del cual se articulan varias conexiones viarias. Se define así un vial adicional paralelo a ese, que habilita un posible acceso al nuevo sector desde la carretera provincial LE-413, «previo refuerzo de esta infraestructura».
Un vial que se apoya también en un conjunto de viales secundarios perpendiculares, que permiten la distribución interna del sector. Sobre todo para la zona sur, prevista para las empresas de menor tamaño.