Un jardín alemán a las afueras de León
El Ceip San Claudio realiza una plantación de árboles en el área deportiva de Puente Castro, con los nombres de cada especie en el idioma germano que se da en 5º y 6º
Momento del trabajo del Ceip San Claudio. DL
La comunidad educativa de los cursos 5º y 6º del colegio San Claudio llevó a cabo una singular iniciativa que deja una huella verde en la ciudad. Se trata de una plantación de árboles junto al área deportiva de Puente Castro, en la que participaron alumnado, profesorado y familias.
«La actividad se propuso desde el área de Ciencias Naturales, con el fin de poner un granito de arena a favor del medio ambiente», señala la directora del centro, Beatriz S. González. Pero sin duda, supuso algo más. «Una actividad de esta índole transciende a un área concreta y toca muchos valores transversales que se trabajan en la etapa de Primaria», añade. La idea partió de una plantación que había realizado la Escuela Oficial de Idiomas (EOI) de León en una parcela próxima a la cedida al colegio.
Plantaron 48 alcornoques, 36 castaños, 24 encinas y 18 fresnos donados por el vivero forestal Ciuden del Bierzo. El Ayuntamiento colaboró desde el primer momento, mediante un contrato de compromiso en el que los servicios municipales se comprometen a limpiar el terreno, ir a buscar los plantones al Bierzo, proporcionar la herramienta necesaria para la plantación y el posterior mantenimiento de lo plantado.
Por su parte el colegio se comprometió a aportar las estacas y protectores de los arbolillos y ¡cómo no! la mano de obra entusiasta de unas 80 familias: Niños y niñas, padres y madres, profesores y profesoras se reunieron en una tarde de viernes ¡para plantar vida! Cada árbol plantado fue apadrinado por un niño que seguramente seguirá de cerca su crecimiento. Llama la atención a los paseantes que las cartelas con los nombres de los árboles estén escritas en alemán. Y es que el colegio San Claudio tiene una sección bilingüe y la clase de Ciencias Naturales se imparte en este idioma.
No hay muchas oportunidades en las que todos los miembros de la comunidad educativa se reúnan para hacer algo juntos y en esta ocasión la oportunidad se aprovechó al máximo. La respuesta fue estupenda y así un centenar de personas y personitas trabajaron unidas por una buena causa. Y ¿quién sabe? ¿por qué no repetir y pensar ya en una segunda fase?