Cien años de una vida de cuidados

Chonina, conocida por sus seres más queridos como Nani, nació el 10 de mayo de 1923 en Rueda del Almirante. Hija de Tuta y Pepe, fue la tercera de cinco hermanos: Rafael, Eresvita, Anibal y Amaranto. Niña en la guerra civil y joven en la Segunda Guerra Mundial, aprendió desde muy joven el valor, el trabajo, el empeño y el cuidado. Tomó los hábitos joven, recién terminada la guerra, y aprendió el oficio que desempeñó el resto de su vida: la enfermería.

Trabajó en los quirófanos del doctor Sáez. Emigró a Alemania para continuar con su profesión y ayudar a los más necesitados. Allí desarrolló su amor al enfermo, aportanto un abrazo amigo donde consolar las penas de la enfermedad. Volvió a España una vez finalizada su tarea y aquí siguió dando consuelo, amor, respeto, ánimo, acompañamiento y cuidado, siempre desde el altruismo. «Todos esos valores se los ha transmitido desde la cuna a mis hijas, a quienes ha cuidado de sol a sol, sin peros, desde la bondad de una abuela. Beatriz, Cristina y Marta están eternamente agradecidas por todo lo que ha hecho por ellas·, asegura Marily Prado García-Lubén.

«Su testimonio es historia viviente de lo que fuimos de lo que somos, y bajo su ejemplo construiremos lo que seremos. Su familia, siempre la tiene como ejemplo de lo bueno y lo correcto».