Cuando el veneno también decora

Algunas de las plantas más comunes que decoran hogares y jardines no son aptas para tenerlas cuando se convive con mascotas, niños o personas alérgicas. Muchas veces se tienen por desconocimiento y por ello, los Kronos Homes ha elaborado un listado para conocer que plantas es menor no tener cerca. Y es solo con tocar alguna de las especies se pude acabar visitando el servicio de urgencias.

El catálogo de especies tóxicas en interiores comienza con la monstera deliciosa, también conocida como ‘costilla de Adán’. Es muy tóxica si sus hojas son ingeridas provocan hinchazón de lengua y faringe, dificultad respiratorias y convulsiones. Espatifilo, también llamada ‘cuna de Moisés’ o lirio de la paz, es habitual en los hogares donde es utilizada como purificador del aire o para refrescar el ambiente. Sin embargo, su ingesta puede traducirse en vómitos, náuseas, diarrea y dificultad para hablar o tragar. En los perros afecta a las mucosas y produce trastornos digestivos.

Muy parecida a la anterior, la cala posee una savia tóxica, por lo que es necesario mantenerla lejos de mascotas y niños. Puede producir desde dolor de garganta a irritación en la piel y las mucosas. También el aparentemente inocuo aloe vera, famoso por sus propiedades medicinales, puede causar una intoxicación grave en perros y gatos.

Decorativa como la que más, la sansevieria es peligrosa. Quien tenga esta planta en casa y observe que su mascota tiene un salivación excesiva o diarrea debería llevarla al veterinario si existen sospechas de haber podido ingerirla. A las personas les provoca síntomas menos graves, como náuseas.

Otra planta clásica en la decoración y de gran tamaño es el filodendro. Está contraindicada en interiores, especialmente si viven niños pequeños en la casa, porque puede provocar dermatitis con su solo contacto, además de una inflamación generalizada del aparato digestivo.

¿Quién no ha tenido un poto? Todas las partes de esta planta son tóxicas, pero especialmente las hojas.