Buscan a los dos trabajadores que vivían en la casa de la mujer asesinada en Reliegos
La víctima, de 57 años, vista el viernes por última vez, fue encontrada en un pozo de su finca con signos de violencia
Las Fuerzas de Seguridad buscaban ayer a dos varones como presuntos sospechosos de estar relacionados con la muerte de una mujer de 57 años que apareció el sábado en un pozo de su finca en la localidad de Reliegos, municipio de Santas Martas, con signos de violencia. Así lo confirmaron varios vecinos que aseguraron que varios agentes habían pasado por los bares y albergues del pueblo preguntando por los dos hombres enseñando fotos suyas de fichas policiales, lo que da a entender que tienen antecedentes. Los propios vecinos señalaron que se trata de dos portugueses que llevaban varias semanas ayudando a la víctima en los trabajos de la explotación hortícola que poseía y que estaban alojados en su misma casa. «No daban buena espina», comenta uno.
El origen de los hechos hay que remontarlo al viernes cuando la víctima fue vista por última vez a las 10.00 de la mañana, según las fuentes oficiales. Algún vecino aseguraba ayer que se la vio a las 12.00 y que a las 13.00 horas su coche fue visto en un paraje en el campo a aproximadamente un kilómetro de su casa. El mismo viernes por la noche una amiga denunció su desaparición. El cuerpo fue encontrado por un amigo el sábado hacia las tres de la tarde en el pozo de la finca que la fallecida tenía anexa a su vivienda «con evidentes signos de violencia», según informaron ayer fuentes oficiales del Ministerio del Interior, que también señalaron que «no hay antecedentes de violencia de género de ningún tipo, ni parece tratarse de un caso de esas características. Sin embargo, la Guardia Civil no descarta ninguna hipótesis. La jueza decretó el sábado el secreto del sumario».
La víctima era Katia S.P., una mujer querida y conocida en la localidad. Nacida en Sao Paulo (Brasil), con orígenes en Reliegos, volvió a España siendo niña y vivió en varias ciudades españolas. Hasta que hace unos años decidió establecerse en Reliegos y emprender un negocio hortícola, La Huertina de Reliegos, de producción ecológica. Incluso en el año 2020 llegó a protagonizar uno de los capítulos del programa de La 7 TV de Castilla y León ‘Me vuelvo al pueblo’.
Vivía sola en una casa alejada unos 200 metros de las últimas casas del casco urbano del pueblo, en una vivienda junto a la que estaba anexa su huerta e invernaderos. Y el pozo en el que apareció muerta.
Según cuentan los vecinos se trataba de una mujer «muy buena que no tenía enemigos en el pueblo». Los propios vecinos señalan que era habitual que tuviera con ella personas (a veces estudiantes, otras rehabilitadas) que le ayudaban en sus trabajos de la huerta y que alojaba en su propia casa, como es el caso de los dos varones que ayer buscaba la Guardia Civil y que desaparecieron del pueblo el mismo viernes en que la víctima fue vista por última vez.
Además Katia era mujer muy activa. Hacía horas trabajando en un local de hostelería de la vecina localidad de Mansilla de las Mulas y también atendía a una familia mayor dependiente en Reliegos. El viernes ya no fue al trabajo por la mañana a Mansilla y una vecina de Reliegos comentaba ayer que el dueño del local le había dicho que «llevaba varios días viéndola muy nerviosa, rara, algo nada normal en ella».
La localidad, de unos 180 habitantes y acostumbrada al paso constante de desconocidos al estar en pleno Camino de Santiago, se encontraba ayer consternada por lo sucedido. «No sabemos quién le ha podido hacer esto a esta mujer. Era demasiado buena y muy confiada porque a veces metía en casa a gente que no conocía. No se puede decir nada ni señalar a nadie, pero esos portugueses no tenían buena pinta», comentaba otra vecina.