Las calles se vuelven cada vez más inaccesibles
- Aumenta el descontento de los vecinos por el mal estado de las calles y las aceras. María Jesús Gallego, una vecina en silla de ruedas de Veguellina de Órbigo, lleva dos años quejándose al alcalde de Villarejo, sin que la situación mejore. Veguellina no es el único caso. Las asociaciones de vecinos de León reciben cada vez más quejas de personas con dificultades para transitar por las aceras, que son cada vez menos accesibles por la falta de mantenimiento.
La falta de mantenimiento de las calles y las aceras no son sólo un problema estético de las ciudades. Cada vez hay más vecinos que se desplazan en sillas de rueda y andadores, personas mayores o con alguna discapacidad física, que se encuentran con obstáculos para poder trasladarse de un lugar a otro de la ciudad. Baldosas que se mueven, poca luz, deterioro del asfaltado, hierbas que crecen en las aceras, obstáculos en el camino, rebajes deteriorados... una larga lista de entornos cada vez menos accesibles para las personas que tienen problemas de movilidad. Y para el resto de la población.
Una de esas personas afectadas es María Jesús Gallego Martínez, vecina de Veguellina de Órbigo, que se desplaza en silla de ruedas eléctrica desde hace dos años. María Jesús ha presentado varias quejas en el Ayuntamiento de Villarejo de Órbigo por el mal estado de las aceras y las calles, un descontento que manifiestan otros vecinos de la localidad en su misma situación. «Llevamos así mucho tiempo, nos hemos quejado muchas veces, pero nada se arregla».
El alcalde de Villarejo de Órbigo, José Manuel Acebes, da la razón a los vecinos. «Hay aceras que están mal, tienen razón. Las obras para arreglarlas están adjudicadas y se han retrasado. No es un problema achacable al Ayuntamiento sino que la empresa contratista ha parado las obras varias veces por falta de personal». El condicionamiento de las calles está incluido en los Planes Provinciales de la Diputación del año 2021 y cuentan con un presupuesto de 45.000 euros. «Ya han arreglado y rebajado aceras y seis pasos de peatones, pero faltan otros seis. El plazo de ejecución estaba fijado en cuatro meses, tenían que haber acabado en febrero de este año. Retomaron las obras en mayo y en verano volvieron a parar». En el plan de acondicionamiento de las calles el alcalde incluye la remodelación de la plaza principal de la localidad, para lo que están presupuestados otros 185.000 euros. «Nos han dicho que comenzarán en octubre, pero todo va muy despacio. El problema es la falta de personal en las empresas adjudicatarias».
Deterioro
Aceras y mobiliario urbano están cada vez más deteriorados por falta de mantenimiento
Pero para María Jesús Gallego y otras personas que usan las sillas de ruedas para sus desplazamientos las explicaciones del alcalde no son suficientes. «Ya no nos creemos nada. Nos dice que las obras están pendientes pero nada avanza. Incluso los rebajes nuevos que han hecho en los pasos de peatones están mal, no es fácil bajar y subir de la acera cuando, como yo, me traslado en silla de ruedas eléctrica. Antes venía una persona conmigo para ayudarme en los desplazamientos, pero ahora con la silla eléctrica voy yo sola y no puedo subir ni bajar. Las calles están hechas un asco. No sólo nos quejamos los que vamos en silla de ruedas, también los que van en andador. Todo el pueblo está igual. Yo me muevo más por la calle principal, donde está el supermercado, la farmacia y el banco, y no se puede transitar con la silla de ruedas».
Aspaym
María Jesús ha trasladado su problema a Aspaym (Asociación Provincial de lesionados medulares y Grandes Discapacitados». «Nos llegan quejas como las de la vecina de Veguellina de Órbigo y nosotros ofrecemos asesoramiento para ayudarles a presentar formalmente una queja», dicen desde la asociación en León. En el año 2022 recibieron catorce de toda Castilla y León. «Son consultas o solicitudes de ayuda que hemos recibido como las de la señora de Villarejo de Órbigo. Nosotros atendemos directamente a los socios para asesorarles en accesibilidad». Aspaym tiene en marcha una Oficina de Accesibilidad Universal, un proyecto pionero en Castilla y León que busca actuar, por un lado, como consultoría y asesoría de accesibilidad universal en diversos ámbitos y, por otro, como promotora de acciones de sensibilización en accesibilidad arquitectónica, digital, educativa, ocio, recursos públicos y nutrición.
El ejemplo de Veguellina de Órbigo no es único.
«Cada vez tenemos más quejas de vecinos en la ciudad de León», asegura el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos, Javier Argüello. «A la ciudad de León le falta mantenimiento en general y los mayores perjudicados con las personas mayores o con falta de movilidad».
Aceras y mobiliario urbano están cada vez más deteriorados. «La ciudad apenas se mantiene desde el año 2011, son más de diez años de dejadez y ahora vemos las consecuencias. Hay una empresa que se dedica al mantenimiento, pero se nota muy poco. En Mariano Andrés presentamos un escrito para que arreglaran tres baldosas que se movían y tardaron ocho meses en arreglarlas. Antes, con las brigadas municipales, iba todo más rápido».
Un ejemplo de la dejadez y el riesgo que corren las personas está en Las Ventas. «Hay un paseo pensado para personas mayores en el que se mueven las baldosas y algunas han desaparecido. Es peligroso por el riesgo de caída». Argüello destaca que la mayoría de las quejas que reciben, y de las que el Ayuntamiento tiene constancia, están relacionadas por la escasez de luz,— «lo que implica un riesgo para las personas mayores con poca visibilidad o que van en silla de ruedas, andador o bastón»— baldosas en mal estado ,—«con el riesgo de tropiezo y caída»— y la limpieza de las aceras— «porque crece la hierba y dificultad el tránsito». La Federación de Asociaciones de Vecinos de León espera la aprobación de los planes de asfaltado. «Pero a ver qué aprueban porque anuncian obras que luego no se retrasan o no se hacen», asegura el vocal de la federación, Jaime García. «Hay quejas de los vecinos de todos los barrios».