Diego García, jurista y filósofo leonés: «Sin ética, el Derecho es injusto»

Diego García Paz, jurista y filósofo leonés, cierra una trilogía en la que ha dado rienda suelta a varias de sus pasiones, porque abarca en este caso personajes históricos y de ficción en mundos tan pegados unos a otros como son los del Derecho, la filosofía, la ética, y en su conjunto la vida. Porque siempre insiste García Paz en llevar lo que puede parecer académico a la calle, como influencia directa en la forma de vivir en sociedad. Así, tras La desesperación como origen del Derecho y Entre la ley y la honestidad culmina este largo viaje con Los ojos vendados de la Justicia (Editorial Torre de Lis, colección Literatura Abierta, 2023), en donde ya de primeras alude a su propia formación al destacar que «el prólogo de este libro es de Alfredo Marcos Martínez, catedrático de Filosofía de la Ciencia de la Universidad de Valladolid e hijo de mi querido profesor de Filosofía Alfredo Marcos Oteruelo en el Legio VII», remarca. Se refiere así a la necesidad y obligación de no olvidar los referentes que de alguna manera han conformado su propia personalidad.

La fórmula de estos libros tiene mucho de profundidad intelectual pero también de un espíritu ameno en cuanto a la lectura, que permitiría el atrevimiento de anunciarlos como publicaciones con talante comercial, de fácil lectura y mucha enjundia. Porque por ellos pasa toda una galería de célebres, incluso ‘celebrities’ sobre los que Diego García Paz pone el acento filosófico.

Pero también hay algo en este leonés en el que si merece la pena leerle lo mismo ocurre al escucharle. Y así, él mismo sienta las bases de este libro y los dos anteriores. «Sobre si hay que extraer conclusiones acerca de estos libros, efectivamente es así. Nacen de artículos que escribí para ciertos medios. La idea que tengo con ello es hacer próximo al lector la verdadera idea de lo que es el Derecho y a lo que sirve el Derecho. Desgraciadamente nos encontramos en unos tiempos en los que se considera que Derecho solo es la norma jurídica, que se residencia únicamente en el Derecho positivo. Lo que se publica en los boletines oficiales. No con mucha calidad por cierto. Lo que quiero transmitir es que hay un concepto mucho más allá de la norma escrita y que se encuentra en la verdadera razón de ser de lo que llamamos normas jurídicas. Para conseguir este objetivo no quise escribir un ensayo de cientos o miles de páginas sino que lo que pretendí fue hacer una especie de enciclopedia, trayendo al presente a muchísimos personajes de la más variada índole. Y me refiero tanto al ámbito de la filosofía, las artes, la historia, la pintura, el cine... Y que todos ellos nos cuenten su vida y qué ocurrió en su conexión con la materia jurídica. Y sorprendentemente todos ellos la tienen. Son un centenar de personajes en la trilogía que nos vienen a decir que si no hay una ética para la realización de las normas, como para su aplicación, el Derecho va a ser un armazón para justificar incluso las mayores de las injusticias. Como es el caso de las reducciones de penas en la actualidad», relata.

Y sobre esta base desfilan por su libros personajes como Marilyn Monroe, Van Gogh, Da Vinci, Maquiavelo... O personajes de ficción. Con todos ellos entabla este juego dialéctico y filosófico. «Todos ellos aunque sean de lo más variopintos nos dirán que si no hay una ética no hay una verdadera Justicia. Se trata por tanto de manifestar a la sociedad que hay que buscar una ética en el Derecho», explica.

Cada libro de esta trilogía conforma una obra conjunta a la que Diego García Paz le ve continuación, por lo que podría tomar el cariz de enciclopedia divulgativa, como el mismo autor ya vislumbra, porque hay en él la vocación y voluntad de escritor. De hecho, añade que «mi idea es que esta colección sea muy próxima para quien no sea experto. Y trasladar que detrás de la cuestión jurídica hay algo mucho más importante como es la moralidad, la ética, el respeto a los derechos fundamentales y humanos».

Leer estos tres libros también es asistir a la propia dinámica del autor, que coge el ritmo y todo funciona literariamente como una máquina perfectamente engrasada, en la que el propio autor detecta ciertas dosis de acidez que van en aumento. Lo que habría que agradecer al autor como prueba de su decidida implicación en este proyecto y el no actuar mecánicamente sino también bajo la influencia de su experiencia vital y profesional.

«Para hacer libros que sean próximos y amenos tiene que haber una vida de lectura, de estudiar, de reflexionar. Que es lo que he hecho en mi vida. Luego se trata de hacer algo creativo. Establecer una filosofía propia, un pensamiento original, que innove. Creo que mi obra va por ahí. Dar una visión de los personajes y de la filosofía jurídica que trato que sea innovadora, y la idea es presentarlos a todos bajo un componente de ética», añade, lo que confirma esa vocación en la que la trilogía ha de ser el comienzo de una auténtica saga divulgativa sobre la materia jurídica, filosófica y ética, con un profundo componente crítico.

En lo personal, Diego García Paz, como Letrado Jefe de Civil y Penal de la Comunidad de Madrid y Académico Correspondiente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España, hace toda una apuesta vital en este proyecto en el que cobra igual valor su experiencia como su actitud siempre volcada en el estudio al servicio de su intuición literaria, que ahí está.

De hecho, García Paz deja pocas cosas al azar. Y si titula este libro Los ojos vendados de la Justicia (Editorial Torre de Lis, colección Literatura Abierta, 2023), todo queda justificado: «La Justicia, encarnada míticamente en una hermosa mujer con los ojos vendados, siempre ha sido una de las cuestiones esenciales no solo para la convivencia social, sino también en el debate filosófico. En la actualidad, este término está siendo objeto de gran exposición mediática y serio cuestionamiento, si bien lo es desde su faceta más superficial, reflejada en una producción normativa motorizada y en las decisiones que de ella se derivan, pero sin ahondar en el trasfondo, en las verdaderas razones que se encuentran tras esta precipitación de acontecimientos legislativos y en la confrontación que suponen con los principios que configuran, desde los albores de la humanidad, a la idea de Justicia».

Diego García Paz, como filósofo y jurista práctico en asuntos de total relevancia, expresa de esta manera su parecer sobre la situación en esta materia e incide en la necesidad, como mecanismo de supervivencia, de acudir a las enseñanzas y ejemplos que importantes personalidades de la historia, del pensamiento, de las artes o de la literatura nos ofrecen (desde Maquiavelo a Tolstói, pasando por Epicuro o Hegel, Lope de Vega, Bécquer, hasta llegar incluso a Stephen King y a tantos otros, algunos de ellos sorprendentes, quienes canalizan la voz del autor y revelan las razones auténticas de lo que ocurre en el presente.

Diego García Paz (León, 1979) es funcionario de carrera del Cuerpo de Letrados de la Comunidad de Madrid. Su carrera académica ha estado caracterizada por la brillantez: obtuvo Matrícula de Honor global al finalizar sus estudios en el Instituto Legio VII de León; se le otorgó una beca a la excelencia académica por el Banco Santander al contar con uno de los veinte mejores expedientes de Bachillerato de España, que le supuso la exención completa de las tasas académicas durante los cinco años de la Licenciatura y bibliografía completa; se licenció en Derecho por la Universidad de León con excelentes calificaciones. Tras superar la oposición y obtener su plaza en propiedad, fue nombrado Académico Correspondiente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España. Como escritor, ha publicado múltiples textos tanto de carácter jurídico (Diario Jurídico, Diario La Ley, Revista Jurídica de la Comunidad de Madrid) como literario (Cuentos desde la oscuridad, Editorial Eolas). Articulista, escribe una columna mensual sobre la relación entre la Filosofía y el Derecho. Y es conferenciante en diversos foros profesionales y culturales.