El Conservatorio da la nota de la esperanza en León
Concierto solidario ‘Agarra la vida’. La música es un arte y puede ser también una terapia. El Conservatorio de León añade el ingrediente de la solidaridad con un concierto a favor del Teléfono de la Esperanza el lunes 11 de diciembre en el Auditorio con el foco puesto en la prevención del suicidio.
Patio de luces de la sede del Teléfono de la Esperanza de León que se encuentra en la calle República Argentina, número 32, primer piso.
El Teléfono de la Esperanza lleva más de medio siglo escuchando historias de soledad y de personas que están en el abismo de la vida. En León atienden más de 4.000 llamadas al año, de las que más de medio centenar tenían que ver con el suicidio .
La reivindicación de un plan nacional que aborde este problema está avalado por unas cifras escalofriantes (más de 4.000 personas se quitaron la vida en 2021 en España —49 en León—) y es una de las motivaciones de la campaña ‘Agarra la vida’ que el Teléfono de la Esperanza puso en marcha en septiembre con un concierto multitudinario en Madrid con motivo del Día de la Prevención del Suicidio.
Un concierto benéfico organizado por el Conservatorio de León a favor del Teléfono de la Esperanza mantiene la estela en León. El lunes 11 de diciembre, las dos orquestas y las dos bandas de música, además del coro del centro, dan la nota de la esperanza en el Auditorio de León a partir de las 19.30 horas.
Se trata de una iniciativa que cumple con la vertiente solidaria que tiene el Conservatorio de Música de León en su plan educativo de centro y con la que, mediante un donativo de cinco euros, se quiere ayudar a mantener la sede y los programas que ofrece el Teléfono de la Esperanza en León.
Llamada de atención
Además del apoyo económico, que es muy importante, con una sede recién estrenada y repleta de actividad, «también agradecemos poder tener visibilidad de la mano de la música que como todos sabemos es terapéutica para el que la escucha y para el que la practica», señala Inma Reyero, responsable de Comunicación en el Teléfono de la Esperanza. Y es que «la música», como apunta esta voluntaria, «es la esperanza del alma».
La cifra de suicidios a nivel estatal no ha dejado de aumentar en los últimos años y ha hecho saltar la voz de alarma sobre un problema social que adquiere dimensión de epidemia. «Es necesario un plan nacional para atajar esta situación», subraya Inma Reyero, responsable de Comunicación.
La asociación leonesa no deja de escuchar las 24 horas del día, 365 días al año, a todas las personas que recurren a su línea «para hablar y desahogarse», que es la principal demanda de esta línea (987 87 60 06). La escucha es la base de su trabajo. Para algunas es la única conversación que mantienen con otros seres humanos en días o semanas, para otras es un asidero al que agarrarse en momentos críticos.
El Teléfono de la Esperanza escucha y forma. «Promocionamos la salud emocional de las personas», subraya. Este mes está abierta la inscripción para los talleres de autoestima, meditación o mindfullness que a lo largo de ocho sesiones, en un día por semana, ofrecen a las personas muros propios de contención y de motivación para vivir. Nuevas formas de agarrar la vida.
En grupos pequeños, de no más de 15 personas por cada taller, se crea un ambiente de confianza y complicidad para compartir situaciones vitales que son únicas pero muchas veces compartidas de una forma u otra por otras personas, como pueden ser el duelo, conflictos en diversos ámbitos de la vida, soledad o desgana.
Fruto de este trabajo en pro de la salud emocional, que van más allá del entrenamiento personal, es el programa ‘Entre amigos’. Personas con dificultades de socialización tienen en el Teléfono de la Esperanza un punto de encuentro para quedar, ver exposiciones, ir al cine, salir de cena o disfrazarse por carnaval. Es un grupo de unas treinta personas. Quedan un día a la semana, sin que la cita requiera más compromiso que las ganas de participar en cualquiera de las actividades que se organicen.
Otro programa clave se centra en paliar la soledad de las personas mayores , que es mucha y va en aumento. Un grupo de 15 personas voluntarias de las 55 que colaboran con el Teléfono de la Esperanza participan en este programa para el que las personas beneficiarias se tienen que inscribir en la entidad.
Este proyecto se quiere ampliar con su implantación en los barrios de la ciudad con el fin de que se creen redes de apoyo entre el vecindario. Y es que la salud emocional de las personas también es un asunto comunitario.
El voluntariado del Teléfono de la Esperanza requiere de una formación específica, como la que tienen las personas orientadoras, que están en primera línea con el teléfono y apoyan en la formación. Además cuentan con profesionales que dan terapia psicológica a personas que carecen de medios o que son supervivientes del suicidio o han pasado por una crisis, mediante un método novedoso impartido por la psicóloga. Fundado en 1971, el Teléfono de la Esperanza abre en León en 2006.