La oxitocina aumenta con un abrazo o un orgasmo
A la oxitocina se la conoce como la ‘hormona del amor’ y de la confianza . Es una molécula, que consta de nueve aminoácidos y que se produce en el sistema nervioso central, en el hipotálamo (donde se controla el estado de ánimo, la frecuencia cardíaca o la sensación de hambre). Sus niveles aumentar cuando nos abrazamos, tenemos relaciones sexuales o un orgasmo. Protege el sistema cardiovascular de las lesiones, ya que reduce la presión sanguínea, la inflamación y la difusión de los radicales libres, un subproducto reactivo del metabolismo celular. Interviene en determinados procesos fisiológicos, activando a nivel mecánico el útero y las mamas, pero también influye en el comportamiento por su acción en determinadas áreas del cerebro.
Disminuye la actividad del sistema nervioso simpático y del eje hipotalámico-hipofisario-suprarrenal, aumenta los niveles endógenos de opiáceos e induce efectos anti estrés, como la bajada de la tensión arterial, ritmo cardiaco y hormonas del estrés, bienestar y relajación, una óptima termorregulación.
Durante el orgasmo masculino, la oxitocina provoca contracciones en la próstata y en las vesículas seminales.