Espacio
Odiseo lleva a la Luna obras de Koons
El módulo tiene programado posarse sobre la Luna en el primer alunizaje de Estados Unidos en más de medio siglo
Unas esculturas diminutas de las fases lunares del artista Jeff Koons van camino a la Luna a bordo del módulo estadounidense Odiseo, que busca realizar este jueves un histórico alunizaje después del ocurrido en 1972 a cargo del Apolo 17.
La que según el proyecto será «la primera galería de arte» en la Luna ha sido posible gracias a la alianza del artista estadounidense con la compañía espacial 4SPACE y su fundadora, Chantelle Baier, que ha diseñado el cubo transparente, llamado Galería de Arte , que protege, lleva y exhibirá las pequeñas lunas.
La obra de arte, titulada Fases lunares» forma parte de la carga comercial del Odiseo, un módulo de aterrizaje de Intuitive Machines, que espera alunizar este jueves como la primera empresa privada estadounidense en posarse en la Luna.
La obra del afamado Koons consta de 125 esculturas de acero inoxidable de aproximadamente 2,5 centímetros de diámetro y es parte de la carga comercial del módulo, que principalmente lleva experimentos de la Nasa.
Cada una de las esculturas corresponde a las distintas fases y puntos de vista de la Luna, y están bautizadas con nombres de famosos como Leonardo da Vinci, Platón, David Bowie, Cleopatra o Andy Warhol.
«Las obras de arte están asociadas con personas que lograron importantes logros», señala un comunicado del proyecto, titulado ‘A la Luna con amor’.
En la Tierra quedan réplicas más grandes de las lunas y un NFT (‘token’ no fungible o vale digital) de la muestra que -según expresa el artista en un video del proyecto- aborda la aspiración global de la humanidad, más allá de la Tierra.
Se prevé que la obra se coloque permanentemente cerca del Polo Sur, donde tiene previsto alunizar Odiseo y una región inexplorada, según la agencia espacial estadounidense Nasa, en el primer alunizaje en medio siglo.
Odiseo despegó el pasado 15 de febrero desde Florida con carga comercial y varios experimentos de la Nasa y se prevé que tendrá pocos días para realizar sus experimentos antes de que prácticamente se congele, debido a las bajas temperaturas lunares.
El módulo, de la serie Nova-C de Intuitive Machines, tiene unos siete días antes de que llegue la noche lunar en el polo sur, dejándolo inoperable.
No está previsto que este módulo, de 4,3 metros de altura y 675 kilos de peso, y el primero estadounidense que llega a la Luna después del Apolo 17 en 1972, regrese a la Tierra.
Específicamente, el aterrizaje es en las inmediaciones del macizo de Malapert, a unos 300 kilómetros del polo sur de la Luna, un área llena de «incertidumbre», según los expertos de la Nasa.