Más eficiencia humana si se colabora con la IA
El vicepresidente de LinkedIn, Xavier Amatriain, defiende la cooperación
El catalán Xavier Amatriain (Terrassa, 1973), hasta hace poco tiempo vicepresidente de ingeniería de LinkedIn, asume que la inteligencia artificial ya «supera» en muchos aspectos a la inteligencia humana, pero defiende que los humanos «podemos ser muchos más eficientes con la colaboración de la IA».
Doctor en informática, Amatriain es un experto en inteligencia artificial y ha trabajado también para compañías como Quora o Telefónica, ha sido investigador en la Universidad de California en Santa Bárbara y también ha sido profesor e investigador en la Universitat Pompeu Fabra.
Aunque vive en California (Estados Unidos) desde hace años, este catalán ha acudido a esta edición del MWC, porque es uno de los invitados a participar en el llamado Talent Arena, un espacio de talento digital impulsado por la fundación MWCapital en este congreso tecnológico.
Sin embargo, uno de los detalles que más llaman la atención de su biografía es que creó el algoritmo de recomendación de Netflix, esa fórmula mágica que hace que millones de personas se enganchen a más y más series y películas de la plataforma.
«Caí en el lugar adecuado y en el momento adecuado», dice de su paso por Neflix, donde trabajó entre 2011 y 2015.
Pese a la fama que da el algoritmo de Netflix, se siente también muy orgulloso de la empresa emergente Curai, que fundó y que busca que millones de personas puedan tener acceso gratuito a medicina.
Aunque considera que la inteligencia artificial va a provocar cambios que serán «muy rápidos, demasiado rápidos para mucha gente a la que le costará mucho adaptarse» y que tampoco será fácil gestionar su impacto tanto a nivel social como empresarial, se muestra optimista.
Un punto de inflexión
Considera que la inteligencia artificial está actualmente «en un punto de inflexión» y que estamos viviendo un momento similar al del nacimiento de Internet.
Sin embargo, cree que la inteligencia artificial puede abrir grandes posibilidades en campos como la medicina.
«La inteligencia artificial es ya hoy en algunos aspectos mejor que un médico medio, pero incluso se acerca a los mejores médicos del mundo en cuestiones como el diagnóstico», opina.
Sin embargo, argumenta que faltan y seguirán faltando médicos en el futuro, y que la IA puede ser parte del equipo de trabajo de un hospital y hacer que un facultativo pueda asumir muchas más visitas que ahora y ser mucho más eficiente.
Amatrain asegura que la IA puede ayudar a los seres humanos a ser más eficientes, como le han ayudado otras muchas herramientas a lo largo de la historia, y que todo depende del uso colaborativo que se haga de ellas.
Cuando se le pregunta qué podrá estudiar un joven para tener un empleo no amenazado por la IA en el futuro, Amatrain explica que su hija es enfermera y que este empleo no estará en cuestión, pero que a su hijo, que es informático, le dice que también podrá seguir ejerciendo como tal siempre que «aprenda a trabajar con la IA».
En este punto, comenta que colabora con una oenegé que trabaja con jóvenes en riesgo de exclusión y subraya que es «muy importante poner la IA al servicio de la gente lo antes posible», para evitar que monopolicen su uso «las personas de siempre, los que tienen dinero y acceso a ella».
Con independencia de la carrera profesional que elija cada persona, este profesional anima a todo el mundo a aprovecharse de las ventajas que ofrece la IA en todos los campos y a intentar tener conversaciones con esta herramienta.
Con todo, asegura que la IA avanza a tal velocidad que no es fácil acompasar al mismo ritmo la regulación. «Tenemos una herramienta muy potente que si se usa bien puede ser extremadamente útil para la humanidad y para nuestro futuro, pero si cae en manos de alguien que la usa para cosas negativas, pues tiene muchos peligros», tal como sucede, salvando las distancias, con la energía nuclear, positiva para generar energía, pero muy perniciosa como arma.