Está de moda tener poca ropa pero sostenible

Cada español se gasta una media de 700 euros al año en comprar ropa. Lo peor es que la mayoría de las prendas de vestir que se adquieren en España, unas 34 al año por persona (que a su vez tira una media de 14 kilos de textil en ese mismo periodo de tiempo), «proceden de países que precarizan en trabajo de niños y niñas, con prácticas contaminantes y textiles de mala calidad». El consumo de moda efímera, la de usar y tirar con mucha suerte con cada cambio de temporada —si es que no se desecha antes— se ha multiplicado por cinco en los últimos veinte años. Usar y tirar, la moda ‘low cost’ no está de moda. «La moda de comercio justo garantiza que se respeta la cadena comercial y el medio ambiente». Tamara Cabezas, del grupo de trabajo por el comercio justo en León, insta a consumir «de una forma consciente», lo que significa que «hay que reflexionar antes si realmente necesitamos tanta ropa o es preferible pagar un poco más por menos prendas para reducir el consumo de textil y apostar por el proximidad y más sostenible». El reciclaje, que también es una opción «no siempre tiene el resultado que se busca porque hay muchas prendas que acaban en los vertederos de otros países. Nos quitamos el problema, pero se lo trasladamos a otros».

Prendas de marcas sostenibles de cuatro tiendas de León participaron este jueves en el desfile de moda de comercio justo. Charada, con la marca King Louie, certificada con la plataforma Fair Wear; Covent Garden, Cascanueces con la marca SKFK y las mochilas de Daniel Chon, Intermón Oxfam, con la firma Veraluna, vistieron a los trece modelos que participaron en esta segunda edición de textil de comercio justo. Nueve modelos de la Escuela de Danza Piluca y cuatro jóvenes con discapacidad intelectual de Asprona pisaron la pasarela para concienciar de la necesidad de cambiar hábitos.

Daniel Roy Vidal Pérez, Francisco Javier Díaz García, Óscar Junior Vidal Urdiales y Borja Ugarte Grant Mainés, usuarios de los recursos de Asprona, modelaron con la ropa de Intermón. «El objetivo es la inclusión en todos los ámbitos. Uno de ellos tiene ligeros problemas de movilidad. Hemos incluido este desfile dentro de las actividades de nuestro 60 aniversario, que se cumple el 22 de diciembre que tiene como lema ‘objetivo inclusión’», destaca Pedro Barrio, gerente de Asprona.

«La alimentación de comercio justo es más conocida, pero en León también hay tiendas que venden prendas confeccionadas con procesos sostenibles y respetuosos con los trabajadores. Hay marcas que ponen mucha atención al patronaje para no desperdiciar telas», explica Tamara Cabezas.

El desfile arrancó con un baile en el que los modelos mostraban en sus camisetas diez objetivos del comercio justo. «Cada vez hay más sensibilidad y apuesta por la ropa de segunda mano, una tendencia que está en auge en las ciudades grandes, pero todavía no ha llegado a León».