Diario de León

Las dos fosas que logró abrir el señor Lorenzo

La ARMH finaliza la exhumación en Matamala con el rescate de cinco cuerpos

Lorenzo Rodríguez pudo contemplar la exhumación de la fosa de Matamala. ARMH

León

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Al señor Lorenzo se le metió en la cabeza que era posible encontrar las fosas de Busdongo y de Aralla y lo ha conseguido. A este vecino de Casares de Arbás, de 78 años, se debe gran parte de la información oral que ha llevado al lugar donde buscaba a sus abuelos, Manuel Rodríguez Cañón y Florentino Martínez Cañón, en Busdongo, en abril de 2023, donde se recuperaron ocho cuerpos, y esta semana, a la fosa de Matamala, en el término de Sena de Luna.

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ha rescatado restos de al menos cinco de las seis víctimas que buscaban. Eran vecinos de Casares de Arbás y militantes de la CNT. Se trata de Sergio Alonso González, de profesión ganadero, casado con Belarmina Cañó; Laurentino Cañón Morán, jornalero; Lisardo Febrero Rodríguez; Manuel Febrero Rodríguez, soltero; Tomás Rodríguez Martínez y Lorenzo Rodríguez Martínez. Algunos, como Laurentino, estuvieron afiliados al 6º Batallón Asturias-León.

Según los datos recabados por la ARMH, fueron asesinados por pistoleros fascistas tras la toma del pueblo de Casares por las tropas franquistas el 13 de septiembre de 1937 en el proceso de caída del frente norte de la Guerra Civil, cuyo objetivo era abrir paso a Asturias. Fueron detenidos ilegalmente y ejecutados extrajudicialmente. La memoria de Lorenzo Rodríguez ha sido clave en encontrar esta fosa en la que entre el jueves y el viernes afloraron cinco cuerpos junto a suelas de calzado, munición, trozos de metralla e incluso una boina de la marca Elósegui, que ya se fabricaban desde finales del siglo XIX.

La exhumación llevada a cabo por voluntariado de la ARMH ha sido extremadamente complicada debido de la humedad del terreno, que se encuentra atravesado por un manantial. La fosa era un agujero producido por el impacto de un proyectil de artillería, en las refriegas que tuvieron lugar entre julio de 1936 y septiembre de 1927 en esta subzona del frente norte. Se buscó otra fosa infructuosamente. La altura de la zona y sobre todo la humedad han dificultado la exhumación. Los restos se encuentran en un estado muy precario de conservación, debido a la incidencia de un manantial que atraviesa el paraje, por lo que las personas expertas de la ARMH consideran que será muy difícil que los resultados del ADN puedan ser concluyentes. Las familias, aliviadas por el hallazgo, después de casi 84 años, valoran realizar un enterramiento colectivo en Casares de Arbás.

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) inició la búsqueda el martes 18 de junio, con todos los permisos de la Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento de Sena de Luna y la junta vecinal de Aralla. La próxima fosa cuya exhumación está en preparación se encuentra en Pobladura de la Tercia. La represión que siguió a la caída del frente norte en septiembre de 1937 fue brutal en la comarca. «En el pueblo de Busdongo, todos miraban al cielo. Las peñas de Peña Laza estaban que echaban fuego», reza una copla que recordaba la señora Quica y que refleja los últimos días del frente: «No quiero prisioneros», había ordenado el general Aranda.

En el frente norte

La fosa era un agujero que se abrió en la tierra por el impacto de un proyectil durante la Guerra Civil

Lorenzo Rodríguez pudo contemplar la exhumación de la fosa de Matamala. ARMH

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