Los incendios aumentan los ingresos por salud mental
Los macroincendios forestales multiplicados en los últimos años por la fuerte progresión en España del cambio climático no solo están devastando la naturaleza y poniendo en grave riesgo a equipos de emergencia y a los vecinos atrapados en el perímetro sino que tienen una repercusión muy directa en el empeoramiento de la salud de la población.
Esta ahora, los estudios clínicos y epidemiológicos habían demostrado que tanto las nubes de micropartículas en suspensión generadas por la combustión de montes, pastos y arboledas, como los episodios de llegada de polvo sahariano, desencadenaban un aumento de las llegadas a las puertas de urgencias de los hospitales de los ciudadanos que las respiraban con enfermedades cardiorespiratorias o dañaban algunas gestaciones, aumentando la posibilidad de partos prematuros o bebés con bajo peso.
Desde hoy también existe la certeza de que estas partículas finas generadas por la quema acelerada de cientos o miles de hectáreas de vegetales por los superincendios veraniegos disparan las visitas a urgencias y las hospitalizaciones por trastornos psicológicos y del comportamiento.
Así lo demuestra un estudio realizado por la Unidad de Cambio Climático, Salud y Medio Ambiente del Instituto de Salud Carlos III, hecho en colaboración con la Universidad de Alcalá y Aemet, y dado a conocer durante una presentación organizada por SMC.
Los investigadores compararon durante una década, de 2009 a 2018, las concentraciones de PM10 y PM2,5, que es la denominación de las partículas finas según su tamaño, de dióxido de nitrógeno (generado por el tráfico), de ozono y los datos de las olas de calor durante los días con grandes incendios forestales o episodios de polvo sahariano respecto de los normales y los cruzaron con las tasas de hospitalización por problemas vinculados a la salud mental.