La misión Artemis II, un paso más cerca
Llega al Centro Espacial Kennedy, en Florida, la primera etapa del cohete de la Nasa que llevará a cuatro astronautas a orbitar la Luna en una misión de diez días
La primera etapa del poderoso cohete SLS que se usará en la misión lunar Artemis II de la Nasa ha completado este miércoles su ingreso a un edificio de ensamblaje del Centro Espacial Kennedy, en Florida (EE UU), donde será integrado con la cápsula Orión.
Los miembros de la misión han retirado hoy la gigantesca etapa de 65 metros de altura desde la barcaza en la que llegó el martes a un muelle del centro espacial ubicado en Cabo Cañaveral, y posteriormente han iniciado su lento traslado, de unas tres horas, sobre una plataforma rodante hasta al edificio en el que permanecerá hasta poco antes del lanzamiento.
Esta etapa del SLS (siglas en inglés de Sistema de Lanzamiento Espacial), fabricada por Boeing, llegó a Cabo Cañaveral a bordo de la barcaza Pegasus tras recorrer casi 1.500 kilómetros desde las instalaciones Michoud, el centro de ensamblaje de la Nasa en Nueva Orleans (Luisiana).
En el edificio en el que se ha instalado, el cohete será sometido a una serie de preparativos antes de que se le acoplen dos cohetes propulsores gemelos y su etapa superior.
Posteriormente, a este vehículo de lanzamiento se le colocará encima la cápsula Orión que transportará a los cuatro tripulantes de la Artemis II, una misión de diez días de duración que está prevista que despegue en septiembre de 2025 y que orbitará la Luna, pero sin descender.
La tripulación estará compuesta por el comandante de la misión Reid Wiseman, el piloto Victor J. Glover, la especialista Christina Koch y el especialista Jeremy Hansen.
El cohete, el más grande fabricado por la Nasa y que contiene cuatro poderosos motores RS-25, cuenta además con dos enormes tanques que en conjunto albergan más de 2.774.707 litros de propulsor líquido súper frío.
Durante el lanzamiento el SLS operará no más de 8 minutos, tiempo en que propulsará a la nave Orión fuera de la atmósfera terrestre y la pondrá en la órbita que la lleve al satélite natural.