La policía hará ‘soplar’ a jóvenes donde el alcohol esté prohibido
El anteproyecto obliga a los supermercados a separar y acotar las bebidas
La ministra de Sanidad Mónica García explicó el anteproyecto de ley sobre el alcohol. MARISCAL
El Consejo de Ministros aprobó ayer el anteproyecto de ley de alcohol y menores, que prohíbe consumir alcohol en colegios e institutos, centros de menores, residencias de estudiantes y en centros deportivos o de ocio cuando haya eventos para adolescentes. Para que los vetos se cumplan, la norma, impulsada por el Ministerio de Sanidad, autoriza a las policías a hacer controles de alcoholemia donde esté prohibido beber.
La nueva ley, que antes de llegar al Parlamento deberá recibir las alegaciones de autonomías y órganos consultivos, es el primer marco nacional destinado a prevenir el consumo de alcohol entre los menores (retrasando la edad de inicio), a reducir borracheras y botellones, a ayudar a quien consume y a llenar los vacíos por donde se elude la prohibición de la venta a menores.
El 42% se emborrachó en el último año (sobre todo las chicas), la mitad participó en botellones y un 28% se dio un atracón en el último mes. Años de teórica prohibición no impiden que el 93% de los jóvenes considere fácil o muy fácil conseguir esta clase de bebida. El alza de consumo adolescente se deriva de una gran tolerancia social, una enorme disponibilidad y la falta de percepción de los graves daños que causa a la salud.
Prohíbe a chicos y adultos el consumo de alcohol en centros docentes, de Infantil a Bachillerato, en centros de protección de menores y residencias de estudiantes que admitan a adolescentes y en instalaciones deportivas, de ocio o espectáculos públicos cuando haya competiciones o sesiones infantiles o juveniles.
Las policías podrán realizar controles de alcoholemia en los lugares o circunstancias específicas donde el consumo de alcohol esté prohibido. Quienes den positivo serán sancionados. Las multas a los menores podrán ser suspendidas a cambio participar en programas de sensibilización, concienciación o rehabilitación.
Sanciones
El anteproyecto del Gobierno prohíbe la venta ambulante y sin licencia en la vía pública. De igual forma, las máquinas de suministro automático de bebidas alcohólicas no podrán instalarse en la calle ni en lugares donde esté prohibida la venta o consumo.
Las máquinas deben incorporar mecanismos técnicos eficaces, con vigilancia y custodia directa, que permitan impedir su adquisición por niños y adolescentes.
La exposición y acceso a bebidas alcohólicas en autoservicios deberá limitarse a un espacio concreto dentro del local que esté separado de los productos destinados a menores. En las tiendas dedicadas a la venta de productos para menores no podrán venderse bebidas alcohólicas.
Vetar aperturas junto a colegios
Las administraciones, para limitar la apertura de establecimientos, podrán tener en cuenta: la densidad o concentración de puntos de venta minorista de bebidas; la cercanía a estos puntos de comercialización de centros educativos, de protección de menores o de establecimientos con espectáculos o actividades recreativas públicas y a los que puedan acceder niños y adolescentes.
Medida sanitaria
El anteproyecto prohíbe cualquier forma directa, indirecta o encubierta de publicidad de bebidas alcohólicas cuando esté dirigida a menores. Esta publicidad no se podrá emplazar en la vía pública o en lugares visibles desde la calle.
El anteproyecto prohíbe cualquier forma directa, indirecta o encubierta de publicidad de bebidas alcohólicas cuando esté dirigida a menores. Esta publicidad no se podrá emplazar en la vía pública o en lugares visibles desde la calle.
No se podrá usar la imagen o la voz de: personas con menos de 21 años; mayores disfrazados de menores; personas o personajes, reales o de ficción, cuya relevancia o popularidad estén vinculadas con los niños o adolescentes; o mujeres en estado de gestación. No se podrán utilizar argumentos, estilos, tipografía o diseños asociados a la cultura de los menores o vincular las bebidas alcohólicas con la mejora del rendimiento físico y el éxito social o sexual. Tampoco se pueden usar términos equívocos como haz un «consumo responsable» o «moderado», pues solo es inocuo para la salud el consumo cero. Los colegios, institutos y universidades impartirán nuevos contenidos sobre prevención del consumo de alcohol.