La mitad de la población de Timor va a misa con el Papa
El Papa ha celebrado una misa multitudinaria en la capital de Timor Oriental, Dili ante 600.000 personas —prácticamente la mitad de la población del país— en la que ha subrayado la importancia de hacerse pequeños y humildes para que Dios haga milagros. En la explanada de Taci Tolu, en Dili, el Papa pidió «no tener miedo» de hacerse «pequeños ante Dios», y ante los demás, «de perder la vida» y de «renunciar» al tiempo para revisar horarios, renunciando a algo para ayudar a un hermano o hermana a ser mejor y más feliz, informa Ep. «No tengamos miedo de reducir nuestros planes cuando sea necesario, no para disminuirlos, sino para hacerlos aún más hermosos mediante el don de nosotros mismos y la aceptación de los demás, con toda la imprevisibilidad que ello conlleva», dijo o en una homilía pronunciada en español. A su juicio, la verdadera realeza se ve «en aquellos que dan su vida por amor».
Tras visitar a niños con graves discapacidades y mantener un encuentro con los obispos, el clero y los religiosos de Timor Oriental a primera hora de la mañana, el Papa se refirió al pasaje bíblico de Isaías: «Un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado». Este pasaje representaba una época próspera para Jerusalén, pero también una época de «gran decadencia moral» en la que los ricos y acomodados «se dejaron seducir por sus riquezas y abandonaron a los pobres».